Unos investigadores españoles han estudiado a 7.000 berberechos con un objetivo: entender el cáncer contagioso

Unos investigadores españoles han estudiado a 7.000 berberechos con un objetivo: entender el cáncer contagioso

La transmisión del cáncer entre seres humanos es un fenómeno anómalo, pero no lo es en el otras ramas del árbol evolutivo. Es algo que sabemos desde hace tiempo, pero ahora un grupo de expertos se ha propuesto estudiar a fondo este fenómeno para entender cómo el cáncer se propaga dentro del cuerpo de una misma persona. Acaban de dar un importante paso: secuenciar el genoma del cáncer.

Una genética inestable. Tras analizar millares de berberechos (Cerastoderma edule) capturados en las costas de 11 países distintos, un equipo internacional de biólogos ha llevado a cabo un amplio estudio del cáncer transmisible que afectan a estos animales. Lo que observaron fue una inmensa inestabilidad cromosómica a lo largo de las distintas meustras de tumor analizadas a lo largo del estudio.

Neoplasia transmisible del bivalvo. El cáncer analizado en estos animales es la neoplasia transmisible del bivalvo o BTN, un tipo de cáncer que afecta a las células del sistema inmunitario de estos berberechos semejante en ciertos aspectos a la leucemia en humanos. Se han documentado ocho tipos de BTN, dos de los cuales se presentaban en las poblaciones analizadas.

Los investigadores creen que este cáncer procede de un ejemplar que vivió hace decenas o cientos de miles de años y que ha ido transmitiéndose a lo largo de generaciones de bivalvos. A pesar de ello, el equipo observó una variabilidad notable entre las células tumorales

Reflejo de esta variabilidad es el número de cromosomas presentes en estas células. Encontraron desde células tumorales con 11 cromosomas hasta células con 354 cromosomas. Como referencia, una célula común de berberecho tiene 38 cromosomas.

7000 berberechos. Los investigadores analizaron 7000 ejemplares del bivalvo procedentes de 36 puntos en las costas de 11 países, entre ellos España, Portugal, Irlanda o Marruecos. Secuenciaron la genética de 61 tumores en los que encontraron dos variedades de BTN. Los detalles del estudio han sido publicados recientemente en un artículo en la revista Nature Cancer.

“Hemos aclarado la existencia de dos cánceres transmisibles independientes, y sospechamos que hay más tipos diferentes ahí fuera. Tener una visión más extensa de los diferentes tipos de cánceres transmisibles puede darnos una percepción de las condiciones necesarias para que los tumores evolucionen y sobrevivan a largo plazo,” explicaba en una nota de prensa Alicia Bruzos.

Milenario. Y es que esta forma de transmisión del cáncer implica que estos tumores, pese a su variabilidad genética, vienen a guardar una misma unidad desde que el tumor fue desarrollado por primera vez. Actuaría así como un organismo que se expande en el cuerpo de un berberecho hasta que una de sus células se desprende y alcanza a otro para volver a expandirse.

Este fenómeno se ha replicado in vitro en cánceres humanos, notablemente en la línea celular HeLa, obtenida en 1951 de una paciente que fallecería meses después, Henrietta Lacks. Esta línea celular permanece viva en decenas de laboratorios a lo largo y ancho del planeta. Curiosamente, esta línea celular sirvió (a través de un experimento de dudosa ética) para comprobar hasta qué punto los tumores humanos son poco contagiosos.

“Tenemos algunas estimaciones que sugieren que la edad de este tumor está entre 100.000 y medio millón de años, pero esto exige un estudio más riguroso” explicaba a El País José Tubío, quien encabeza el grupo de investigadores responsable del estudio. “Seguramente es el cáncer transmisible más antiguo que se conoce”.

Una lista larga. Los cánceres transmisibles son (por lo que sabemos, que es poco) más la excepción que la regla. Hasta ahora hemos detectado once: además de los ocho que afectan a bivalvos, tenemos constancia de dos que afectan al diablo de Tasmania (Sarcophilus harrisii) y otro más que afecta a los perros.

¿Por qué el interés en un cáncer que no afecta a los humanos? En términos médicos, el cáncer en berberechos no tiene implicaciones para el ser humano, pero en términos económicos y ecológicos sí puede tenerlo, al menos si la enfermedad se extiende en lugares de pesca de estos animales o si acaba poniendo en riesgo esta especie.

Más allá de eso, el trabajo desarrollado por este equipo puede ayudarnos a entender mejor la variabilidad genética en los cánceres humanos. Más aún, podría ayudarnos a luchar contra la metástasis, la forma de “contagio” con la que los tumores se extienden en nuestro cuerpo y muy estrechamente vinculada con la mortalidad asociada a estas enfermedades.

En Xataka | El paciente que ha sobrevivido a 12 tumores distintos y esconde el "santo grial" de la lucha contra el cáncer

Imagen | Jebulon

-
La noticia Unos investigadores españoles han estudiado a 7.000 berberechos con un objetivo: entender el cáncer contagioso fue publicada originalmente en Xataka por Pablo Martínez-Juarez .

Leer más

Acabamos de descubrir un nuevo tipo de oxígeno que ha desconcertado a los físicos

Acabamos de descubrir un nuevo tipo de oxígeno que ha desconcertado a los físicos

El oxígeno es uno de los átomos imprescindibles para la vida, pero tiene más caras de las que imaginamos. Si atendemos a sus moléculas, por ejemplo, podemos ver que las propiedades del oxígeno molecular (O2) son distintas de las del ozono (O3). Pero los átomos mismos de oxígeno también guardan propiedades secretas, y ahora un isótopo de este elemento desconcierta a los expertos.

Oxígeno 28. Un equipo de investigadores ha observado por primera vez un nuevo isótopo del oxígeno, el oxígeno 28, el más masivo observado hasta ahora. Esto no sería especialmente relevante (también se observó por primera vez el isótopo 27 del elemento)si no fuera porque observaron que este isótopo no se comportaba de la forma en la que los modelos preveían: se trata de un isótopo inestable del oxígeno.

El núcleo del oxígeno 28 consta de ocho protones (lo que le confiere sus propiedades como elemento) y 20 neutrones, para un total de 28 nucleones. Como contraste, el isótopo del oxígeno que más frecuentemente ocurre en nuestro entorno es el oxígeno 16, cuyo núcleo se compone de ocho protones y ocho neutrones.

El oxígeno 16 es uno de los tres isótopos estables del oxígeno, es decir, aquellos cuyas partículas no se desintegran de manera natural con la pérdida de protones o neutrones de su interior. Los otros dos isótopos estables del oxígeno son el oxígeno 17 y el 18.

Menos estable.  Hasta ahora los expertos creían en base a las teorías más extendidas sobre estabilidad nuclear que al oxígeno 28 le correspondía ser un isótopo estable. Sin embargo, al “crear” átomos en un laboratorio comprobaron que estos se desintegraban.

Los isótopos de oxígeno pueden decaer y transformarse en otros elementos, nitrógeno o carbono por ejemplo si el núcleo pierde uno o dos protones respectivamente. Sin embargo el decaimiento de los isótopos 27 y 28 se produce por la pérdida de neutrones según observaron los investigadores, lo que implica que pasaban a convertirse en otro isótopo del oxígeno (oxígeno 24).

Números mágicos”. El descubrimiento implica por tanto que los físicos van a tener que revisar esta teoría que predecía la estabilidad del oxígeno 28. En física atómica y nuclear se considera la existencia de una serie de “números mágicos”. En el caso de los núcleos atómicos, los números mágicos se asocian a la estabilidad.

Tanto 8 como 20 son números mágicos, lo que haría al oxígeno 28 un número “doblemente mágico”, explicaban los investigadores. Los otros números mágicos conocidos son 2, 28, 50, 82 y 126.

Fábrica de Haces de Isótopos. Los investigadores crearon este nuevo isótopo en las instalaciones de la Fábrica de Haces de Isótopos Radiactivos RIKEN, un centro de investigación situado en Japón. Las instalaciones de la fábrica cuentan con un acelerador de tipo ciclotrón, gracias al cual es posible crear isótopos inestables.

Los investigadores aceleraron un haz de átomos de calcio 48 contra un objetivo de berilio para crear flúor 29, isótopo que después se lanzaría contra hidrógeno con el fin de hacerlo perder un protón y convertirse así en oxígeno 28. Los detalles de este proceso y sus resultados fuerpon publicados recientemente en un artículo en la revista Nature.

En Xataka | El evento más raro jamás registrado: un detector de materia oscura ha sido capaz de captar la muerte del xenón-124

Imagen | Fábrica de Haces de Isótopos Radiactivos RIKEN / fdecomite

-
La noticia Acabamos de descubrir un nuevo tipo de oxígeno que ha desconcertado a los físicos fue publicada originalmente en Xataka por Pablo Martínez-Juarez .

Leer más

La “red cósmica’ escondida en los confines más oscuros del universo, vista como nunca antes

La

Una inmensa red se extiende a lo largo y ancho de nuestro universo, una red compuesta de filamentos que conectan el espacio intergaláctico. Esta red permanecía oculta en la oscuridad, invisible a los mecanismos de detección creados por la humanidad. Hasta ahora.

Filamentos cósmicos. Un equipo de astrofísicos ha logrado "ver" una red de filamentos oculta en el vacío del espacio intergaláctico. La existencia de esta red cósmica, como suele denominarse, era bien conocida, pero hasta ahora sólo había podido detectarse en contextos puntuales, en regiones “iluminadas” por cuásares. El nuevo trabajo permite visualizar esta inmensa estructura que se extiende entre las galaxias.

“Antes de este descubrimiento habíamos visto las estructuras filamentarias bajo el equivalente a una farola,” explicaba en una nota de prensa el astrofísico  Christopher Martin, uno de los autores de la investigación. “Ahora podemos verlas sin una lámpara.”

Materia oscura e hidrógeno. ¿Qué es esta exactamente red? Se trata de una red compuesta de filamentos que se extienden entre las galaxias de nuestro cosmos. A lo largo de estos filamentos se acumula y fluye el hidrógeno del espacio intergaláctico, uniendo no sólo galaxias sino también cúmulos de estas.

¿Qué es lo que hace que este gas se acumule en estas regiones? En base a los modelos cosmológicos dominantes los científicos creen que, antes que por gas, estos filamentos estarían compuestos de materia oscura.

La arquitectura de nuestro universo. Esta red es más que un mapa de carreteras, es el sistema vascular a través del cual llega a las galaxias el hidrógeno que acaba condensándose en determinadas regiones donde alimenta el nacimiento de las estrellas. Se estima que cerca del 60% del hidrógeno de nuestro universo se encuentra en esta red.

“Esta red cósmica delinea la arquitectura de nuestro universo,” explica Martin. “Es donde resida la mayor parte de la materia normal, o bariónica, de nuestra galaxia y traza directamente la localización de la materia oscura.”

De la farola al mapa. El hidrógeno de estas regiones, frío y poco denso es difícil de observar, en contraste al hidrógeno que ilumina estrellas y otras regiones del universo. Los investigadores lo lograron creando un instrumento para la búsqueda de emisiones Lyman-alfa, la “huella espectral” que deja el hidrógeno cuando absorbe y reemite radiación.

Surgió así el Keck Cosmic Web Imager del Keck Observatory, situado en Hawai. Los investigadores aprovecharon la expansión del universo y el fenómeno asociado, el corrimiento al rojo, para convertir las imágenes tomadas en mapas tridimensionales de estos filamentos. Los detalles de su trabajo han sido publicados en un artículo en la revista Nature Astronomy.

Un vistazo al pasado. El mapa no sólo se extiende en el espacio, también en el tiempo ya que la escala de los filamentos cartografiados abarca regiones a unos 10.000 o 12.000 millones de años luz de nuestro planeta.

El trabajo podría servir para entender diversos aspectos del universo que nos rodea más allá de la ubicación de estos filamentos, quizá el más importante tiene que ver con la materia oscura. Esta materia está presente en una mayor proporción en nuestro universo que la materia común o bariónica. Ubicar estos filamentos nos ayuda a ubicar también, al menos en parte, la materia oscura de nuestro cosmos.

En Xataka | ¿Nuestra Vía Láctea es una galaxia zombi y nosotros sin saberlo?

Imagen | Caltech/R. Hurt (IPAC)

-
La noticia La "red cósmica' escondida en los confines más oscuros del universo, vista como nunca antes fue publicada originalmente en Xataka por Pablo Martínez-Juarez .

Leer más

El “ejercicio en pastilla” podría estar más cerca de lo que creemos. Y no sólo servirá para adelgazar

El “ejercicio en pastilla” podría estar más cerca de lo que creemos. Y no sólo servirá para adelgazar

Los fármacos capaces de hacernos adelgazar se han vuelto populares en los últimos meses. Los más populares (y quizás los únicos que han demostrado eficacia en este sentido) nos hacen adelgazar alterando nuestro apetito. Ahora, un nuevo tratamiento plantea un método bien distinto, el de imitar el ejercicio físico.

Un nuevo fármaco. Un nuevo tratamiento para la pérdida de peso está mostrando resultados prometedores en los primeros estudios de laboratorio, realizados en ratones. El fármaco es conocido por ahora con el código SLU-PP-332, y funciona acelerando nuestro metabolismo “engañando” a nuestro cuerpo y haciéndole pensar que nos hemos ejercitado.

Este modus operandi lo distingue de fármacos como la semaglutida, el tratamiento contra la diabetes que se ha popularizado entre quienes buscan perder peso. La semaglutida, también conocida por su nombre comercial, Ozempic, reduce el apetito y causa náuseas, lo que reduce el consumo calórico diario y así hace que la gente adelgace.

Ejercicio en pastilla. El nuevo tratamiento no afecta ni al apetito ni al consumo de comida, explican sus desarrolladores. Este nuevo fármaco estimula el mismo mecanismo metabólico que el ejercicio. Esto es, el efecto de este compuesto en nuestro cuerpo es equiparable al de haber realizado un entrenamiento físico. Eso sí, en los experimentos, el compuesto no hacía que los ratones se ejercitaran más.

“Este compuesto básicamente le está diciendo al músculo esquelético que realice los mismos cambios que ves durante un entrenamiento de resistencia,” explicaba en una nota de prensa Thomas Burris, uno de los investigadores involucrados en el desarrollo.

Un futuro por determinar. Los desarrolladores del fármaco creen que su utilidad futura podrá ir más allá de la pérdida de peso. En los primeros ensayos con ratones observaron que tras consumir el compuesto estos podían correr hasta un 50% más distancia.

Los investigadores creen que el tratamiento podría ayudar con diversos problemas de salud como la diabetes o la pérdida de masa muscular asociada con la edad. Quizá más relevante aún, el equipo se encuentra trabajando en comprobar si este compuesto puede ayudar a tratar problemas de corazón reforzando los músculos cardiacos.

Mimetizar el ejercicio. SLU-PP-332 no es el primer compuesto en su género. Sin embargo hasta ahora ningún “mimético del ejercicio” ha llegado a ser comercializado.

El nuevo fármaco tiene como objetivo un grupo específico de proteínas, las proteínas ERR (estrogen receptor-related receptors), estrechamente vinculadas no sólo en músculos motores sino también en el corazón y el cerebro. Estas proteínas tienden a activarse con el ejercicio pero, hasta ahora, resultaba imposible activarlas a través de los miméticos conocidos.

Los detalles del estudio han sido publicados recientemente en un artículo en la revista Journal of Pharmacology and Experimental Therapeutics.

Por ahora, en ratones. El tratamiento aún está en fases tempranas. Los últimos hallazgos corresponden con ensayos de laboratorio realizados sobre ratones. Esto implica que el camino aún es largo antes de que este fármaco llegue a ser comercializado. Si es que llega: la posibilidad de no alcanzar las farmacias está siempre presente en el desarrollo de fármacos.

Uno de los pasos previos será el comprobar sus efectos secundarios. Por ahora los primeros experimentos no han observado efectos negativos graves en los ratones. Nuevos experimentos en modelos animales serán todavía necesarios antes de que el tratamiento se pruebe siquiera en humanos.

En Xataka | Hacer deporte no sirve para adelgazar, pero sí para mantenerte. La ciencia ya lo tiene claro

Imagen | Bruno Nascimento

-
La noticia El “ejercicio en pastilla” podría estar más cerca de lo que creemos. Y no sólo servirá para adelgazar fue publicada originalmente en Xataka por Pablo Martínez-Juarez .

Leer más

La NASA ya tiene las muestras de Bennu en sus manos. Su objetivo: descubrir si la vida vino del espacio

La NASA ya tiene las muestras de Bennu en sus manos. Su objetivo: descubrir si la vida vino del espacio

Los expertos de la NASA encargados de gestionar las muestras del asteroide Bennu traídas a la Tierra por la misión OSIRIR-REx tienen ya las manos en la masa. Por masa queremos decir la colección de regolitos del asteroide, una colección que podría revelarnos mucho sobre los orígenes del sistema solar, pero también sobre el origen de la vida en nuestro propio planeta.

En manos expertas. Las muestras arribadas a la Tierra el pasado domingo fueron transportadas el lunes al Johnson Space Center de la NASA. Ahí los expertos de la agencia abrieron la cápsula, en condiciones muy controladas, y desde entonces continúan con los primeros análisis.

Por ahora es poco lo que ha trascendido. Según las descripciones, parte de la muestra tiene una consistencia similar al polvo y un color negro.  Cabe esperar que a esto se refiera tan solo a una parte de la muestra y que ésta también incluya piezas de mayor tamaño.

El proceso de desensamblado es largo y complejo y no sabemos en qué etapa nos encontramos. Lo que sí sabemos es que las estimaciones realizadas antes de la llegada de la muestra hablaban de unos 250 gramos de material, si bien la incertidumbre sobre la masa total era alta.

11 de octubre. Habrá que esperar antes de que la NASA confirme aspectos tan básicos de la muestra como éste. Quizá lo hagan el 11 de octubre, cuando la agencia espacial ha realizado un llamamiento para dar las primeras informaciones sobre estos análisis preliminares.

Las muestras no se quedarán exclusivamente en manos norteamericanas. La NASA se ha comprometido a compartir parte de la muestra con centros de investigación de todo el mundo. Es de prever que los laboratorios japoneses se lleven alguna muestra, puesto que la agencia nipona ya compartió con los estadounidenses parte de la pequeña muestra traída por su misión Hayabusa2.

El origen de la vida. Los análisis en profundidad de estas muestras nos ayudarán a comprender algunos aspectos importantes del origen de nuestro sistema solar, pero uno de los análisis más esperados tiene que ver no con orígenes geológicos sino con los orígenes biológicos.

Si los “ingredientes para la vida” llegaron a nuestro planeta de otros lugares del sistema solar o si por el contrario se formaron a través de procesos geológicos propios (o si deberíamos hablar de alguna combinación, en qué medida) es hoy por hoy un misterio. Si bien contamos con muestras de meteoritos que nos ayudan a responder esta pregunta, obtener na muestra pura, sin contaminantes de origen terrestre es clave para acercarnos a la verdad.

“Seremos capaces de decir mucho sobre lo que pasó cuando el sistema solar no era más que polvo y gas, y [sobre] el proceso que unió a los planetas y creó los ingredientes para la vida en la Tierra”, explicaba en una nota de prensa Nick Timms, mineralogista de la Curtin University.

4.500 millones de años. Esta historia de cuando nuestro sistema solar era “polvo y rocas” nos ayudará por tanto a comprender los procesos de formación planetaria yel por qué de la diversidad existente en nuestro sistema solar.

Los expertos creen que los asteroides como Bennu son auténticas “cápsulas del tiempo” puesto que los minerales que los componen son tan antiguos como el sistema solar, y posiblemente incluso más. Esto sin mencionar que conocer mejor la composición y consistencia de estos cuerpos celestes puede ayudarnos algún día a preparar misiones en el evento de que alguno de ellos acabe en trayectoria de impacto contra nuestro planeta.

En cualquier caso, lejos de la vida terrestre y de los procesos geológicos dados en la Tierra, sin duda muestras como la de Bennu nos ayudarán, como mínimo, a entender mejor el universo que nos rodea.

En Xataka | Algo raro está ocurriendo con Dimorphos, el asteroide que desviamos a través de la misión DART

Imagen | NASA/Keegan Barber

-
La noticia La NASA ya tiene las muestras de Bennu en sus manos. Su objetivo: descubrir si la vida vino del espacio fue publicada originalmente en Xataka por Pablo Martínez-Juarez .

Leer más

40 millones de años antes de los dinosaurios, unos megadepredadores dominaban la Tierra: los dinocéfalos

40 millones de años antes de los dinosaurios, unos megadepredadores dominaban la Tierra: los dinocéfalos

Hubo una época en la que los dinosaurios dominaban la Tierra. Sin embargo animales como los Tiranosaurios no fueron los primeros grandes depredadores en habitar y dominar las tierras emergidas. Millones de años antes que ellos, algunos de sus antecesores ya resultaban feroces y temibles cazadores.

Así lo demuestra un fósil hallado recientemente en el sur de Brasil, cerca de São Gabriel, en el estado de Rio Grande do Sul, cerca de la frontera con Uruguay. Se trata de un cráneo de 36 centímetros de longitud, perteneciente a un animal que vivió hace 265 millones de años.

Esto son 40 millones de años antes del inicio estimado del Triásico, el primer periodo del mesozoico, la era de los dinosaurios. El cráneo pertenece al mayor depredador terrestres conocido del Pérmico, el Pampaphoneus biccai.

El periodo Pérmico se extiende en el periodo entre hace unos 290 millones de años y hace aproximadamente 250 millones de años. Se trata del periodo final del paleozoico, previo al evento conocido como extinción masiva del Pérmico-Triásico o la “gran mortandad”. Ésta es la mayor extinción masiva de la que tenemos registro: se estima que desaparecieron el 86% de las especies existentes.

El animal es uno de los primeros terápsidos (Therapsida) y pertenecía al orden de los dinocéfalos (Dinocephalia). Los  dinocéfalos eran un grupo variado, no todos ellos carnívoros, como sí es el caso del P. biccai.

El nuevo cráneo nos da información nueva sobre este animal prehistórico. Gracias a este elemento los investigadores han podido calcular las dimensiones de estos animales. Los P. biccai podrían haber alcanzado los tres metros de altura y 400 kg de peso. Los detalles del análisis al que se sometió el fósil fueron publicados recientemente en un artículo en la revista Zoological Journal of the Linnean Society.

“Este animal era una bestia de aspecto retorcido, y debería haber evocado terror absoluto en cualquier cosa que se cruzara en su camino,” explicaba la peleontóloga Stephanie Pierce en una nota de prensa.

No es para menos, según explica en la misma nota Felipe Pinheiro, otro de los responsables de la investigación, “su dentadura y arquitectura craneal sugiere que su mordedura era suficientemente fuerte como para mascar huesos, más o menos como las hienas modernas.” No resulta demasiado sorprendente si atendemos a la etimología de la palabra dinocéfalo: “cabeza terrible”.

Los investigadores también tienen una idea de cuáles podían ser algunas de las presas de este depredador. Estas especies abarcarían desde pequeños reptiles como el Rastodon hasta anfibios de gran tamaño como el Konzhukovia.

“Su descubrimiento es clave para proveer un vistazo en la estructura comunal de los ecosistemas terrestres justo antes de la mayor extinción masiva de la historia. Un hallazgo espectacular que demuestra la importancia global del registro fósil de Brasil”, agregaba Pierce.

En cuanto al rol del Pampaphoneus en su ecosistema, Pinhero lo compara con los grandes felinos modernos, se trataba del “mayor depredador terrestre que conocemos del Pérmico en Sudamérica.”

Los investigadores creen que todavía podría haber más. Una mandíbula aún por estudiar les hace intuir la posibilidad de que el cráneo de 36 centímetros de este ejemplar no perteneciera a un ejemplar adulto.

De confirmarse que la mandíbula pertenecía a un Pampaphoneus, sería el tercer ejemplar de esta especie hallado en Sudamérica. Además, podría forzar a los investigadores a revisar al alza el tamaño de este enorme animal.

En Xataka | Hemos descubierto a los primos "primitivos" del T. Rex. Y tienen cosas que contar sobre la extinción de los dinosaurios

Imagen | Reconstrucción del Pampaphoneus biccai, Márcio Castro

-
La noticia 40 millones de años antes de los dinosaurios, unos megadepredadores dominaban la Tierra: los dinocéfalos fue publicada originalmente en Xataka por Pablo Martínez-Juarez .

Leer más

El Sáhara fue durante mucho tiempo un vergel. Ahora comprendemos mejor cómo se convirtió en un desierto

El Sáhara fue durante mucho tiempo un vergel. Ahora comprendemos mejor cómo se convirtió en un desierto

La palabra Sahara deriva del vocablo árabe para designar a los desiertos. Y lo cierto es que el desierto del Sahara no solo es uno de los más conocidos, también es uno de los mayores y más importantes de la Tierra. Sin embargo no siempre fue así, hubo un tiempo en el que este entorno era un auténtico vergel.

Entendiendo la desertificación. Un nuevo trabajo ha estudiado los cambios en el ecosistema de la región del norte de África que denominamos el desierto del Sahara. Si bien ya sabíamos que esta región no siempre fue desértica, un nuevo trabajo ha identificado las posibles causas de estos cambios.

Las causas detrás de estas “fases húmedas” del actual desierto serían pequeñas variaciones en la órbita terrestre.

Los investigadores emplearon modelos climáticos no solo para identificar las posibles causas de los cambios en esta región, sino que también estimaron los periodos en los que, a lo largo de los últimos 800.000 años, el desierto floreció.

Modelos climáticos. “Nuestro estudio es uno de los primeros en modelado climático en simular los Periodos Húmedos Africanos con una magnitud comparable a la indicada por las observaciones paleoclimáticas, revelando por qué y cuándo ocurrieron estos eventos,” indicaba en una nota de prensa Edward Armstrong, coautor del trabajo.

El reciente estudio se ha valido de modelos climáticos para reimaginar los últimos 800.000 años de existencia de la región del Sáhara. A través de estas simulaciones crearon una cronología de las sucesivas fases húmedas y secas del norte de África.

Precesión. Los investigadores observaron que las simulaciones señalaban un culpable de estas variaciones: el movimiento de precesión. Este concepto hace referencia a un movimiento del eje de rotación de la Tierra. Éste es un movimiento retrógrado que completa un ciclo cada 25.800 años.

Al afectar al eje de la Tierra, el movimiento en implica cambios en las estaciones del año, y con ello en cómo se distribuye la radiación solar a lo largo del año y en distintas regiones del planeta. En el caso africano el movimiento afecta a los monzones, alterando significativamente el clima del continente.

Para llegar a esta conclusión los investigadores aprovecharon un modelo climático de reciente creación para resolver una cuestión que hasta ahora había resultado esquiva a los expertos en climatología. Los detalles del estudio han sido publicados recientemente en un artículo en la revista Nature Communications.

Una puerta. Esta variación ha tenido importantes consecuencias ambientales tal y como explican los autores de la investigación. Las épocas de “Sáhara húmedo” propiciaron un puente para que la fauna africana transitara a lo largo del continente y llegara hasta Europa y Asia.

Fauna como, por ejemplo, los humanos. Hoy por hoy la hipótesis dominante sobre el surgimiento de los humanos sitúa este evento en África. Nuestros antepasados pudieron haber aprovechado estas eras en las que el Sáhara abría sus puertas al tránsito de animales.

Cambios en el clima. El estudio sirve como recordatorio de que los presentes modelos climáticos tienen en cuenta la cantidad de radiación solar que llega a la superficie del planeta. Podría resultar tentador achacar las tendencias climáticas recientes a variaciones en la energía que llega a nuestro planeta, bien por cambios orbitales bien por la variación natural causada por los ciclos solares.

Aún hay margen para la mejora de los modelos, tanto de los climáticos que tratan de entender el clima presente y futuro como los paleoclimáticos, aquellos que tratan de describir el clima pasado. Trabajos como este podrían ayudarnos a mejorar tanto unos como otros.

En Xataka | Llenar el Sáhara de paneles solares suena muy bien y muy lógico. En realidad es una idea desastrosa

Imagen | 7523944

-
La noticia El Sáhara fue durante mucho tiempo un vergel. Ahora comprendemos mejor cómo se convirtió en un desierto fue publicada originalmente en Xataka por Pablo Martínez-Juarez .

Leer más

Virgin Galactic decidió enviar restos humanos prehistóricos al espacio. A los arqueólogos no les ha hecho gracia

Virgin Galactic decidió enviar restos humanos prehistóricos al espacio. A los arqueólogos no les ha hecho gracia

A comienzos de mes la empresa aeroespacial Virgin Galactic organizó un vuelo suborbital en el que viajaba un objeto muy singular: un tubo con restos humanos fosilizados. Esto no ha sentado bien a varios científicos que han hecho público su malestar.

El vuelo de Virgin Galactic partió de Spaceport America, la base espacial de la empresa situada en Nuevo México, el pasado 8 de septiembre. Según lo previsto, el VSS Unity se separó del avión nodriza, el VMS Eve, a unos 12 kilómetros de altura para arrancar su trayecto suborbital.

Hasta ahí todo normal. Lo que hacía especial este viaje era lo que iba a bordo: restos fósiles de dos humanos prehistóricos que viajaban en un tubo que podría haberse confundido con la funda de un puro. Uno de los fragmentos, parte de una clavícula, pertenecía a un Australopithecus sediba de cerca de 2 millones de años de antigüedad. El segundo era el pulgar de un Homo naledi que vivió hace unos 300.000 años.

Ambos fósiles pertenecen a especies de la subtribu de los homininos (Hominina), el grupo taxonómico que abarca a los humanos modernos (Homo sapiens) y otras especies antecesoras y emparentadas como los neandertales y otras especies del género Homo y el resto de las especies de Australopitecus.

Ambos restos fueron descubiertos en Sudáfrica y fueron seleccionados por Lee Berger, director del Centro para la Exploración del Viaje Humano profundo de la Universidad de Witwatersrand. Berger estuvo implicado en ambos descubrimientos, el primero en 2008 y el segundo en 2013. El encargado de transportar el singular cargamento fue Timothy Nash, un millonario también sudafricano.

En una nota de prensa el mismo día del despegue, Berger destacaba cómo “el viaje de estos fósiles al espacio representa la apreciación de la humanidad a la contribución de todos [nuestros] ancestros (…).” Berger enlazaba en su comentario el descubrimiento de tecnologías como fuego y herramientas como antecesores de los logros en materia aeroespacial.

Lluvia de críticas

Ahora parece que son muchos los que discrepan y no ven este trayecto como una buena forma de mostrar aprecio. Según explicaba Ewen Callaway en un artículo en Nature, el viaje de los restos fósiles fue acogido con rechazo por parte de una buena parte de la comunidad científica, notablemente por parte de arqueólogos y paleoantropólogos.

Según esto, los expertos habrían rechazado este viaje como mera herramienta publicitaria que puso en riesgo valioso patrimonio arqueológico y paleoantropógico. El artículo señala que, si bien estos no son los primeros fósiles en ser enviados al espacio sí se trataba de la primera ocasión en la que se enviaban restos fósiles pertenecientes a una especie homínina al espacio.

El artículo cita por ejemplo a la geóloga Robyn Pickering, miembro del equipo científico que dató el fósil de A. sediba: “no hay mérito científico en esto”, explicaba refiriéndose al riesgo asociado a lanzar al espacio estos restos.

Otro crítico con esta decisión ha sido Alessio Veneziano, uno de los organizadores de la conferencia (Advances in Human Evolution, Adaptation and Diversity). Resumía en cuatro puntos el malestar de la comunidad científica, comenzando por la falta de justificación científica para el trayecto. Para muchos el riesgo que implicaba un vuelo orbital no era compensado sin tal justificación científica.

Otro punto señalado por Veneziano es quizá uno de los más espinosos. El acceso a recursos como estos huesos está muy limitado. Muchos investigadores ven frustrado su trabajo por las limitaciones impuestas en el análisis de elementos como este. Ver que el turismo espacial tiene alguna forma de preferencia sobre ellos, puede resultar especialmente frustrante.

Veneziano señalaba asimismo la cuestión ética que implica el trato con restos humanos antiguos. Como punto final, Veneziano apuntaba que todo este asunto suponía una tergiversación de la práctica paleoantropológica.

El debate queda, por tanto abierto. Parece complicado justificar el fin científico del viaje espacial y con ello el riesgo asumido al cargar los fósiles a bordo. Sin embargo esta no es la única cuestión a resolver. Si el viaje representa alguna forma de ofensa o aprecio por los humanos a quienes pertenecieron los huesos fosilizados resulta un debate enteramente subjetivo.

Sin embargo el debate también muestra algunos de los problemas a los que los investigadores tienen que enfrentarse en su día a día: como recursos limitados y trámites burocráticos a menudo Kafkianos. Esto deja entrever un contraste entre las vías a las que se tienen que enfrentar los científicos y las que afrontan agentes externos. Desde luego no todo en este debate pertenece al contexto de lo subjetivo.

En Xataka | La historia de una de las ideas más peligrosas jamás pensada: la teoría de la evolución

Imagen | Lee Roger Berger research team, CC BY 4.0

-
La noticia Virgin Galactic decidió enviar restos humanos prehistóricos al espacio. A los arqueólogos no les ha hecho gracia fue publicada originalmente en Xataka por Pablo Martínez-Juarez .

Leer más

La posibilidad de que se estampe contra nosotros dentro de siete siglos es lo menos interesante del asteroide Bennu

La posibilidad de que se estampe contra nosotros dentro de siete siglos es lo menos interesante del asteroide Bennu

Bennu es un cometa muy interesante para los astrónomos, no tanto por la (muy escasa) probabilidad de que se estrelle contra nuestro planeta sino porque está siendo objeto de una de las misiones más ambiciosas y menos conocidas de la NASA.

Potencialmente peligroso”. El asteroide Bennu ha sido en los últimos días un centro de atención mediática. Uno de los aspectos que más resaltan de este cuerpo celeste es el hecho de que se lo considera como “potencialmente peligroso” debido a su gran tamaño y al hecho de que su órbita se cruza con la de nuestro planeta. La probabilidad es pequeña y distante en el tiempo.

¿Cómo de pequeña? Según los últimos cálculos del Center for Near Earth Object Studies (CNEOS), el centro del Jet Propulsion Labde la NASA que monitoriza las órbitas de asteroides y comentas de nuestro entorno así como sus probabilidades de estrellarse contra nosotros en algún momento del futuro previsible es de una entre 1.800.

Esta cifra representa una estimación de la probabilidad acumulada de impactos a lo largo de muchas órbitas de los próximos doscientos años aproximadamente. Si nos centramos en casos concretos, según las últimas estimaciones (generadas en 2021), como recordaba recientemente la física Mar Gómez, el acercamiento más peligroso ocurrirá en septiembre de 2182, y la probabilidad de choque será de una entre 2700 o un 0,037%.

Estimando el daño. El daño que el asteroide pudiera causar en la Tierra dependería de muchos factores. Dos de los más importantes serían la velocidad de choque y su masa. Bennu tiene un diámetro de 490 metros y una masa estimada de 74.000.000 de toneladas. Además se calcula que su velocidad al momento del hipotético impacto rondaría los 12,7 kilómetros por segundo.

En base a estos parámetros, CNEOS calcula que el hipotético impacto de Bennu del año 2182 liberaría cerca de 1.421 megatones de energía. Eso son 28 veces más que los liberados por la Tsar Bomba, la mayor bomba nuclear creada por la humanidad.

Sin embargo hay otros muchos factores que pueden afectar de forma muy significativa a los daños causados por el impacto de un asteroide. Uno de ellos es la composición de este y la consistencia de la materia que lo conforma.

OSIRIS-Rex. Aquí es donde entran en juego misiones como OSIRIS-Rex (Origins, Spectral Interpretation, Resource Identification and Security – Regolith Explorer). La nave despegó de la Tierra en septiembre de 2016 y alcanzó el asteroide dos años después.

Ya en 2020, la nave descendió hacia Bennu con el fin de recoger muestras del regolito asteroidal, es decir, de las rocas de su superficie. La misión fue un éxito y la sonda envió estas muestras a la Tierra.

Tres años después, la nave se dispone a liberar su paquete en dirección a la Tierra. Este aterrizará este domingo 24 algo después de las 16:00, hora peninsular. Esta será al menos la hora a la que la NASA comenzará la retransmisión de la llegada de las muestras.

Apophis explorer. Hace unos meses la NASA anunció que iba a alargar la vida de la sonda encargándole otra misión, la de viajar a otro asteroide que en su día fue considerado peligroso para nuestra existencia, Apophis.

Aunque hoy en día la NASA haya descartado cualquier posibilidad de impacto de este cuerpo contra nuestro planeta en más de un siglo, los primeros cálculos de su órbita estimaron una posibilidad de impacto del 2,7%. La siguiente misión, que será conocida como OSIRIS-APEX será acercarse a este asteroide para estudiarlo con detenimiento.

Misiones como las de OSIRIS y DART (la misión que se estrelló contra el asteroide Dimorphos con el fin de poner a prueba la posibilidad de desviar asteroides en caso de necesidad) son claves a la hora de diseñar estrategias que puedan evitar el posible choque de meteoritos contra la Tierra. Sin embargo también son de gran importancia a la hora de entender el origen de nuestro propio sistema solar y el planeta que habitamos.

En Xataka | Qué es la escala Torino y por qué el asteroide más hablado de los últimos días acaba de ser degradado

Imagen | NASA

-
La noticia La posibilidad de que se estampe contra nosotros dentro de siete siglos es lo menos interesante del asteroide Bennu fue publicada originalmente en Xataka por Pablo Martínez-Juarez .

Leer más