Andorra pone límites al éxodo youtuber: primero el catalán y ahora un mayor control de las inversiones inmobiliarias
A pesar de las polémicas, muchos youtubers famosos y creadores de contenidos hicieron las maletas y pusieron rumbo a los valles de Andorra buscando un régimen fiscal más laxo. Al principio las autoridades andorranas no solo vieron con buenos ojos este éxodo, sino que lo incentivaron. Ahora, el Gobierno de Andorra parece haber cambiado de opinión y cada vez pone más trabas para que inversores extranjeros se asienten en sus territorios.
Primero por el idioma, ahora con la inversión. Hace unas semanas, el gobierno andorrano puso en marcha una nueva normativa que imponía el uso del catalán, idioma oficial del Principado, como requisito imprescindible para obtener o renovar la residencia en el país. Ahora, el turno le toca a la fiscalidad y las inversiones inmobiliarias.
El consejo de ministros del Principado quiere intensificar el control de inversiones extranjeras ante el impacto que estas están causando en la economía del país. Conxita Marsol, ministra de Presidencia, Economía, Trabajo y Vivienda, ha anunciado la intención de suspender de manera transitoria la autorización de inversión extranjera en inmuebles y modificar la normativa actual para imponer nuevos controles para esa inversión.
El problema de la vivienda especulativa. Desde 2020, Andorra se había convertido en una perita en dulce para los inversores extranjeros: una fiscalidad muy laxa y una demanda al alza de vivienda para los nuevos habitantes que hacían cola para solicitar la residencia. Entre los numerosos requisitos que se exigía a los solicitantes de residencia se encontraba el de realizar un depósito mínimo de 47.500 euros o, según el tipo de solicitud, una inversión inmobiliaria superior a 400.000 euros en el país. Algo habitual para conseguir los populares pasaportes dorados.
Este aumento en la demanda y un suelo edificable cada vez más escaso y escarpado, ha provocado un déficit de vivienda y el correspondiente repunte en sus precios, dando rienda suelta a la especulación inmobiliaria. Conxita Marsol ha destacado que la moratoria para bloquear las inversiones es “una medida puntual que contribuirá a afrontar la problemática que tiene el país en escasez de vivienda de alquiler a precio asequible, como paso previo necesario durante este otoño para el establecimiento de un tributo sobre la inversión extranjera en inmuebles”.
Nuevos controles para las inversiones extranjeras. A partir de ahora, todas las inversiones deberán registrarse ante le gobierno, y este tendrá la última palabra sobre su viabilidad para preservar la seguridad nacional, la soberanía del territorio y el medio ambiente. “El control a posteriori garantiza un mejor seguimiento de la calidad de la inversión y sus efectos sobre el PIB, y un ahorro del tiempo del potencial inversor”, agregó Jordi Gallardo, ministro de Presidencia, Economía y Empresa.
Mediante este mecanismo de control, el Gobierno tiene la potestad de ordenar la anulación de la inversión, su liquidación o limitar los derechos de voto o distribución de dividendos en sociedades. Además, cuando se formalice la nueva normativa, se incluirá un nuevo impuesto para este tipo de inversiones y la obligación de mantener la inversión durante un determinado tiempo bajo penalización tributaria.
Youtubers que han abusado del sistema. No se puede decir que la respuesta del ejecutivo andorrano haya sido una sorpresa. Hace algunos meses, ya había mostrado sus discrepancias con las inversiones inmobiliarias de algunos youtubers que habían solicitado la residencia, y que habían copado las propiedades de alquiler disponibles para dedicarlas a alquiler turístico con el que se obtiene un mayor beneficio y en menor tiempo.
En Xataka | Encontrar un alquiler barato ya no es la primera barrera que afrontan los inquilinos: es el casting
Imagen |Flickr (Stephen Downes)
–
La noticia
Andorra pone límites al éxodo youtuber: primero el catalán y ahora un mayor control de las inversiones inmobiliarias
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Rubén Andrés
.