Ganar 1.000 millones no es fácil. Este joven de 26 años lo ha conseguido haciendo que ChatGPT le pregunte a él
El tópico de multimillonario hecho a sí mismo acostumbra a ser una romantización de la parte bonita del capitalismo. Una sucesión de hechos que hacen que una persona que ha sabido estar en el lugar y en el momento adecuado se haga multimillonario por ofrecer algo que nadie más (o mejor) ofrece. Es el caso de Alexandr Wang, el hijo de unos físicos nucleares chinos que emigraron a Nuevo México y que ha conseguido ser el millonario “hecho a sí mismo” más joven.
Genio precoz y con buen ojo. Alexandr Wang es hijo de una pareja de físicos nucleares chinos que emigraron a Nuevo México para trabajar en la misma base militar que vio nacer la primera bomba nuclear de Oppenheimer. Dada su buena disposición para la programación y las matemáticas, a los 17 años comenzó a trabajar como programador en el portal Quora, y allí conoció a Lucy Guo, con quien más adelante fundaría la startup que les ha hecho millonarios.
Tras graduarse, comenzó sus estudios en el prestigioso Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT) pero sus inquietudes empresariales hicieron que lo dejara tras un año y medio de estudios para dedicarse a tiempo completo a su empresa. “Le dije a mis padres que esto iba a ser algo que solo haría durante el verano. Obviamente, nunca más volví a la escuela”, dijo en una entrevista a Forbes.
Scale AI, la gallina de los huevos de oro. Probablemente Scale AI no te suene de nada, pero, tal y como la define Wang en su entrevista con Forbes, “somos los picos y las palas en la fiebre del oro de la inteligencia artificial generativa”. El secreto del éxito de Alexandr Wang ha sido darle a grandes multinacionales como AirBnB, Toyota, Uber o General Motors las herramientas para usar sus propios datos de forma eficiente. Estas multinacionales tenían cantidades ingentes de datos, pero no estaban etiquetados, por lo que los distintos modelos de IA que necesitaban estas empresas no podían distinguir un avión de una loncha de jamón.
Muchos comparan Scale AI con los servicios en la nube de Amazon o los chips de Nvidia: una herramienta de soporte para la IA sin la cual es imposible el desarrollo de los modelos de IA. Sin datos no hay paraíso.
Scale AI y los ‘Likes’ de Instagram. Comprar seguidores falsos era una práctica habitual entre los influencers que no solo querían hacer postureo ante sus seguidores, sino que también lo hacían para inflar sus cifras de audiencia ante las marcas los patrocinaban. Tras las restricciones algorítmicas implementadas en las redes sociales para minimizar estas prácticas, las granjas de clicks se han reinventado y ahora hacen el trabajo sucio para la inteligencia artificial.
Alexandr Wang, ha sabido aprovechar el potencial de estas granjas. Scale AI usa la supervisión de 240.000 personas en Tailandia, Filipinas o Venezuela cobrando menos de 1 dólar por hora por etiquetar datos que luego venden a empresas. El sistema es, en esencia, el mismo que antes se usaba para darle Like a la foto de un influencer con ínfulas.
26 años y la empresa con mayor potencial de Silicon Valley. El patrimonio de Alexandr Wang se valora ya por encima de los 1.000 millones de dólares, pero su empresa ya supera con creces los 7.300 millones de cotización. La posición de Scale AI se afianza en Silicon Valley tras conseguir importantes inversiones con el Departamento de Defensa de Estados Unidos o OpenAI. El ejército de EE. UU está usando Scale AI para mejorar el sistema de reconocimiento de imágenes por satélite y monitorizar los impactos de misiles rusos en las zonas pobladas de Ucrania.
Apunta bien su nombre porque todo apunta a que Alexandr Wang está llamado a convertirse en el nuevo Elon Musk, Jeff Bezos o Mark Zuckerberg marcado por el cambio tecnológico que está generando más movimiento en la lista de las personas más ricas del mundo en los últimos tiempos.
Imagen | Alexandr Wang
–
La noticia
Ganar 1.000 millones no es fácil. Este joven de 26 años lo ha conseguido haciendo que ChatGPT le pregunte a él
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Rubén Andrés
.