En estas singulares torres en las afueras de las ciudades se prueban los ascensores que van a parar a los rascacielos
Lejos de las grandes ciudades en las que predominan los rascacielos se erigen torres enormes que no suelen encajar en el paisaje. Estas estructuras solitarias e imponentes pueden despertar curiosidad o desconcertar a quienes desconocen cuál es su función o qué hay dentro. Afortunadamente no esconden misterio alguno: se trata de estructuras diseñadas para poner a prueba a los ascensores.
Laboratorios de pruebas verticales
No es común encontrarse con este tipo de torres de ensayos, en el mundo hay poco más de 30, pero cuando aparecen en el horizonte, lo dominan por completo gracias a su altura. La mayoría de ellas se encuentran en países asiáticos y han sido construidas en polígonos industriales o zonas poco pobladas por las propias compañías que fabrican y desarrollan ascensores.
Torres de ensayo de ascensores de Hitachi
La torre de ensayo de más grande del mundo, denominada H1 Tower, está ubicada en la periferia de Guangzhou, China. Fue construida por Hitachi y tiene 273 metros de altura. En Rottweil, Alemania, se ubica uno de los laboratorios de ascensores de ThyssenKrupp, que si bien no es el mas alto (246 m), destaca por ser el epicentro de pruebas de un innovador ascensor sin cables y por contar un mirador abierto al público.
Hueco de ascensor en la torre de pruebas de ThyssenKrupp Elevator
El club de los fabricantes de ascensores está integrado por nombres conocidos como Hyundai Elevator y Mitsubishi Electric, pero también hay compañías que son pesos pesados del sector como la estadounidense Otis, la griega Kleemann, la finlandesa Kone y la sueca suiza Schindler, esta última con torres de pruebas en Shanghái, Lucerna y Sevilla.
Pero no solo se trata de compañías privadas. En 2013 la Universidad de Extremadura anunció la construcción de una torre de ensayos de más de 40 metros de altura y 13 plantas en el campus de Badajoz. Desafortunadamente el proyecto ha experimentado problemas de financiación que le han impedido completarse. No obstante, se espera que el laboratorio de transporte vertical de la UEx comience a funcionar en 2022.
Las torres de ensayos juegan un rol clave a la hora de probar los ascensores. Estas están diseñadas para evaluar los límites de estrés y fatiga de las cabinas, maquinarias de tracción, cuerdas, guías y sistemas de reducción de velocidad y paracaídas en un entorno controlado. También se efectúan pruebas de velocidad, las cuales requieren de una altura mínima para alcanzar la aceleración necesaria.
Imágenes |ThyssenKrupp | Hitachi
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En estas singulares torres en las afueras de las ciudades se prueban los ascensores que van a parar a los rascacielos
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Javier Marquez
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