Roborock Dyad, análisis: un aspirador-fregador inalámbrico tan original y diferente como infalible con el suelo de baldosa

Para gustos, los colores. Y para diferentes necesidades, sigue creciendo el espectro de aspiradores con propuestas como este Roborock Dyad, ideado única y exclusivamente para aspirar y fregar a la vez los suelos. Porque no, no es posible solo aspirar. Este es un electrodoméstico bastante peculiar en su diseño, funcionamiento y propuesta, como iremos viendo a lo largo de este análisis en el que os contamos cómo ha sido nuestra experiencia probándolo a fondo.

Un diseño que sabe a una vuelta a los orígenes

Acostumbrada a los aspiradores verticales sin cables, el Roborock Dyad me dejó impactada a primera vista, recordándome inevitablemente al veterano aspirador vertical con cable que compró mi suegra al distribuidor de la Thermomix, el fiable (tiene una década y ahí sigue el campeón) Vorwerk Kobold.

La cuestión aquí es que aunque este original aspirador de Roborock es inalámbrico, está ideado para que vayamos deslizándolo por el suelo y no elevándolo para otras limpiezas, así que no necesita un diseño ligero ni esbelto. Y menos mal, porque es contundente. Eso sí, moverlo por el suelo es bastante cómodo. Por cierto, como curiosidad: en la actualidad la versión inalámbrica del Kobold también dispone de un módulo para aspirar y fregar a la vez.

Su estructura consta esencialmente de tres segmentos:

• El mango está hecho de aluminio y plástico, resultando cómodo y ofreciendo un buen agarre. Allí encontrarás el botón de encendido, el de autolimpieza y el que te permite alternar entre los modos.

• En el cuerpo se encuentran integrados dos motores responsables del trabajo de limpieza, los dos depósitos de agua limpia y agua sucia respectivamente, el sistema de filtrado y la pantalla. Está hecho de plástico y los depósitos son translúcidos para que podamos ver la cantidad de agua que hay en cada uno. Especialmente interesante es la pantalla, situada en la parte superior:allí se muestra el porcentaje de batería, el modo de operación y un gráfico en forma de anillo que cambia de color entre rojo y azul en función de la potencia.

• Finalmente en la zona inferior localizamos tres rodillos alineados encargados de la aspiración y el fregado. Una de las piezas clave para que este aspirador sea cómodo de pasar es la rótula que lo une al cuerpo, que ayuda bastante porque se inclina y rota 360 grados para llegar mejor a los bordes.

La movilidad de la rótula es la responsable de que aunque visualmente el Roborock Dyad resulte algo aparatoso, se desenvuelva sorprendentemente bien. Así, podrás inclinar el cuerpo para introducirse en huecos por ejemplo debajo de las mesas o de la cama.

Con todo, no se inclina hasta ponerse en horizontal, por lo que al final es habitual que tengas que terminar empujando la mesa o la cama respectivamente para una limpieza completa. Un extra del diseño muy original es que en el cuerpo tiene una especie de patilla como las bicis para dejarlo inclinado y que así no se caiga ni se vierta el agua.

La puesta en marcha es tan sencilla como montar las dos piezas de la base, incrustarle el mango, llenar el depósito superior y a funcionar.

Cómo es la limpieza

Para comprender mejor cómo es la limpieza de este aparato merece la pena detenerse en el funcionamiento de los rodillos: un motor está dedicado al rodillo delantero y el otro es responsable de los dos rodillos traseros que están dispuestos uno a cada lado en un único eje. Al girar en direcciones contrarias, el aspirador levanta y elimina la suciedad húmeda y seca, según la marca.

Y ahora ya sí: el concepto de limpieza del Roborock Dyad es curioso, ya que aspira y friega a la vez. En teoría suena bonito, porque haces dos cosas en una, pero en la práctica hay claroscuros.

Os pongo un ejemplo: si un suelo está muy sucio, lo normal es que le des varias pasadas para poder aspirar todo lo que haya. Cuando lo haces, la porquería se humedece y se produce una especie de “barrillo” no muy atractivo.

Y esto pasa de vez en cuando. Si tenéis perro y lo bañáis en casa, cuando termináis el baño parece la zona 0 de un tsunami entre pelos, arenilla y agua.

Lo bueno es que en general este “aspirador todoterreno” va a lidiar con menos suciedad: algún pelo, polvo, migas, algo de tierra… y aquí funciona bastante bien. Ya hemos visto en el apartado de de diseño que los cepillos giran para adaptarse mejor, pero son algo toscos y voluminosos para enfrentarse a lugares estrechos.

Una suerte parecida sufren los rodillos, que acaban bastante sucios después de una limpieza completa. Afortunadamente, Roborock ha pensado en ello y cuenta con un sistema de autolimpieza que deberías activar al dejarlo en la base. Esta autolimpieza requiere un par de minutos y consume agua, pero es muy efectiva.

El Roborock Dyad también gestiona conjuntamente potencia y dosificación de agua, otro proceder cuanto menos curioso, porque puede enfrentarse a un suelo sin manchas pero con mucha suciedad depositada y viceversa. Como detalla la firma, cuenta con un sistema de detección de manchas mediante infrarrojos para tal fin.

Así, vas a encontrar dos modos de operación:

• El modo MAX ofrece la aspiración y fregado máximos, y está destinado precisamente para trabajar a pleno pulmón.

• El que más he usado ha sido el modo AUTO, que ajusta automáticamente su trabajo en función de lo que se va encontrando, si bien el funcionamiento no es lo más fino del mundo, ya que en algunas ocasiones opta por verter más agua aunque esa zona concreta no esté especialmente más sucia.

Lógicamente limpiar con el modo MAX consume más batería, reduciendo su autonomía a algo más de 20 minutos.

Con todo, en mi casa de 50 metros cuadrados he ido sobrada por dos cuestiones: primero, que el espacio es reducido y segundo, que eres tú quien da las pasadas, por lo que trabajas lo que es justo y necesario.

Y no, salvo que tengas una mansión, la batería no va a ser un problema, porque en cuanto lo devuelvas a la base, va a cargarse de nuevo. Y es más probable que te quedes sin agua si tienes una casa enorme que sin batería.

Lo que más me ha gustado ha sido que precisamente porque eres tú quien lo pasa, el fregado está a años luz del de los robots aspiradores para bien, ya que puedes incidir en manchas viejas y resecas. Además la dosificación del agua es muy buena, permitiéndote pisar el suelo pocos minutos después.

Una función de lo más práctica es la del secado, que puedes activar con una pulsación prolongada sobre el botón de modos, utilísimo para cuando por ejemplo sales de la ducha y dejas todo lleno de agua.

Mantenimiento

La operación de mantenimiento que más he realizado durante mi análisis con diferencia es el vaciado del depósito de agua sucia, un procedimiento rápido y fácil, aunque no muy agradable ya que vas a encontrar sólidos y líquidos.

Situado en la parte central del cuerpo, es tan sencillo como pulsar la pestaña y tirar del asa para extraerlo. Después solo hay que levantar la pieza del filtro y volcarlo en el WC.

Asimismo también es recomendable retirar la suciedad – generalmente pelos – que se acumulan en el filtro, para lo que viene genial el cepillo incluido en la caja. Una vez está limpio visualmente, enjuágalo con agua, agítalo para secarlo y devuélvelo a su posición cuando esté seco.

Aunque los cepillos del Roborock Dyad se limpian automáticamente, de vez en cuando también conviene darles un repaso manual.

• Para limpiar el rodillo delantero es necesario quitar el plástico protector protector frontal y liberarlo pulsando sobre la pestaña del lateral derecho.

• Para soltar los rodillos traseros, giraremos de las tuercas dispuestas a cada lado y tiraremos hacia el exterior. Una vez los limpiemos, tendremos cuidado de devolver cada uno a su lugar (rojo – azul) repitiendo el procedimiento pero a la inversa.

Roborock Dyad, la opinión de Xataka

La de Roborock con su Dyad es una apuesta que demuestra mucha personalidad. Hay aspiradores inalámbricos, robots aspiradores que además friegan y también robots que únicamente friegan, pero la firma china se aventura por un camino sin explorar: el de los modelos inalámbricos que únicamente aspiran y friegan simultáneamente.

Esta elección tiene ciertas limitaciones, como no poderse usar en suelos como parqués o en alfombras (recordemos que no puede solo aspirar), tampoco tiene la versatilidad de los clásicos aspiradores sin cables con sus respectivos accesorios, pero también la ventaja de cumplir con lo que promete: aspira y friega bien, aunque todavía tiene aspectos por pulir en diseño y funcionamiento.

Como es un aspirador “único en su especie” resulta complicado enmarcarlo en gamas de precios, pero nos sirve como referencia que hay alternativas sin cables que también pueden fregar como los modelos Ergowet de Cecotec por unos 300 euros o el Vorwerk Kobold VB (849 euros solo y 1.259 euros con el accesorio) al que has de añadirle el módulo SPB100 aparte. Eso sí, en ambos casos aspiran y friegan a la vez gracias a un elemento extra, pero disponen de otros accesorios intercambiables para ganar en funcionalidad.

¿Es una apuesta arriesgada? El tiempo lo dirá, pero si hay usuarios que únicamente quieren limpiar un suelo de baldosas aspirando y fregando de una vez, es un acierto seguro.

Este producto ha sido cedido para la prueba por parte de Roborock. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas.

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La noticia

Roborock Dyad, análisis: un aspirador-fregador inalámbrico tan original y diferente como infalible con el suelo de baldosa

fue publicada originalmente en

Xataka

por
Eva Rodríguez de Luis

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