El tenis en Santa Marta es mucho más que tenis: tecnología y deporte para mejorar la condición de personas con discapacidad
Hace unos meses os pedimos a vosotros, Xatakeros, que nos contaseis esos proyectos pequeños, locales y HONORables que conocíais y que estaban generando un impacto positivo a su alrededor gracias a la tecnología. Esta historia, como la de La Exclusiva y la de Nordesnet, ha sido posible gracias a vosotros.
En Santa Marta de Tormes, provincia de Salamanca, hay una escuela de tenis municipal que es mucho más que una escuela de tenis. En sus instalaciones no solo se aprende a jugar, sino que se combinan tecnología y deporte de forma altruista para ayudar a muchas personas con algún tipo de discapacidad o algún problema de movilidad reducida.
“Aquí vienen personas con síndrome de Down, con enfermades raras, autismo, parálisis cerebral, tercera edad… Cualquier persona que quiera mejorar su calidad de vida”, cuenta Óscar Torres, director y responsable del proyecto.
La historia de la Escuela de Tenis de Santa Marta, en vídeo
Terapias de todo tipo para mejorar el día a día
“Hacemos terapias motóricas, auditivas, vestibulares… Cualquier tipo de requisito que quiera mejorar a la persona”, explica. La franja de edad de quienes asisten a estas terapias es amplia, oscila entre los dos y los noventa años.
Movimientos sacádicos, atención sostenida, propiocepción, sistema vestibular…
En una de sus clases nos explica qué están haciendo exactamente los asistentes. Uno de ellos está frente a un mosaico de hexágonos de dos colores al mismo tiempo que mantiene el equilibrio sobre dos soportes inestables.
“Estamos trabajando convergencia con los ojos, movimientos sacádicos que son los saltos que hacen los ojos, atención sostenida porque tienen que darse cuenta por dónde van, y procesamiento cognitivo. Es una terapia visual, propioceptiva y vestibular; tres cosas a la vez. Y si le pusiera unos cascos, auditiva”. Cascos no solo para reproducir sonido: también cuentan con algunos dispositivos de realidad virtual.
En la escuela hacen distintas pruebas a los asistentes para, a partir de sus resultados, decidir qué terapia mejorará más rápidamente su desempeño a la hora de hablar o de moverse, por ejemplo.
Asistimos a una de estas pruebas, la que hace el centro con Irene, una de las asistentes. Irene, de 22 años y con síndrome de Down, lleva asistiendo cuatro años a esta escuela. “Me encanta el tenis, es mi deporte favorito. Usamos cascos, la cinta…”. Su madre, Catalina García, que además preside la Asociación de Síndrome de Down de Salamanca, habla de esas mejorías.
“Más que un desarrollo en el habla, que ella nunca ha tenido problema con eso, en su relación, su espontaneidad y sus desbloqueos. Ella se bloqueaba mucho, y no es algo que haya desaparecido, pero casi te diría que sí. Irene no hablaba con nadie, y eso ha ido desapareciendo. Ella es capaz de relacionarse”, cuenta. “Ella aquí tiene terapia, deporte y relaciones humanas. Se siente muy integrada y muy a gusto”.
“No hay beneficios aquí, todo se reinvierte en tecnología”, explica Óscar sobre la escuela. “Tenemos un equipo multidisciplinar. Contamos con un neurólogo, con una psicóloga, yo soy pedagogo-terapeuta, educación física, pedagogía terapéutica, una serie de cuestiones… Más otras personas que colaboran conmigo desde el colegio”.
Un caso particular de éxito y relacionado con estos colaboradores es el de Cristina, que empezó siendo una asistente más a estas terapias, y ahora es ella quien las imparte.
Nos lo cuenta Óscar: “Cristina era una niña que iba haciendo sus terapias, iba mejorando su habla, iba mejorando motóricamente… Y como un día vi que iba teniendo más desparpajo a la hora de hablar, le propuse el reto de incluirla a nivel laboral dentro de la escuela. Ahora es profesora y estoy encantado con ella, no la cambiaría por ninguno de los monitores”.
Cristina empezó a asistir a esta escuela hace nueve años, y ahora ayuda a los niños que también asisten a estas terapias asistiendo en el montaje de los recursos o explicando todo lo que sea necesario.
Óscar era profesor de Educación Física y hace más de veinte años que comenzó con esta actividad. “Pensaba que si yo tenía muchos conocimientos iba a poder ir ayudando a cada vez más personas. Pero pese a mis estudios, sin estas máquinas no sería posible hacer lo que hacemos. Aquí viene gente de muchos sitios de España. En 2017 presenté mi proyecto al ayuntamiento, fue seleccionado, y aquí estoy. Gracias a ello tengo disponibles las instalaciones para la escuela, ser prioritario… No puedo pedir más al ayuntamiento”.
El neurólogo Juan Pablo Romero valora muy positivamente este tipo de terapias. “Estas terapias aumentan la capacidad perceptiva y de procesamiento de información. Cuando una persona hace deporte, potencia su plasticidad cerebral. Si se potencia con estas técnicas, como el entrenamiento de la visión periférica, beneficia también al procesamiento de información, permite procesar dos tipos de información simultánea”.
Y explica que los beneficios de unas terapias que se mezclan con el deporte van luego mucho más allá del deporte. “La idea que ahora predomina en neurorehabilitación es que el cerebro funciona como una red. Si trabajas en una parte de esa red, mejoras toda esa red. Si rehabilitas una de las partes de esa red cognitiva, ayudará a rehabilitar todas las demás. También se ha visto que los ejercicios motores suponen una mejora cognitiva en personas de cualquier condición, puedes usar esa mejora en otros tipos de tareas: visuales, cognitivas, etc. Me parece muy interesante el uso de estas terapias combinadas”, explica el doctor.
Hablamos también con David Mingo, alcalde de Santa Marta de Tormes. “Apostamos mucho por la idea de Óscar, es muy novedosa, se trabaja muy poco de las administraciones pese a que requiere su apoyo”.
“El futuro es crecer en infraestructura, en contar con más profesionales que me puedan echar una mano, en materiales… Y crecer en valores. Los valores se están perdiendo. Cuando mis propios alumnos me ayudan a dar esas clases o me ayudan con los discapacitados, estamos creciendo en valores”, remata Óscar.
Esta historia forma parte de ‘En busca de la HONORabilidad’, un proyecto de Xataka y Honor en el que buscamos proyectos que usen la tecnología para mejorar el mundo y generar un impacto positivo en su entorno.
–
La noticia
El tenis en Santa Marta es mucho más que tenis: tecnología y deporte para mejorar la condición de personas con discapacidad
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Javier Lacort
.