“He invertido cientos de horas de mi vida en diseñar coches de Lego”
El Lego se ha convertido en los últimos años en un fenómeno que todo el mundo conoce y quiere disfrutar, lleno de posibilidades y diversión, apto para los peques de la casa y para adultos. Este pequeño mundo de diminutas piezas y muñequitos, también llamadas minifigs, se suele ver desde un punto de vista como cliente y constructor de sets oficiales de Lego, que cualquiera con una edad mínima y algo de habilidad puede montar siguiendo las instrucciones.
Pero existe otro lado de esta afición, la otra cara de este hobby, mucho más compleja y creativa. Este mundo no es otro que la comunidad de aficionados adultos al Lego, también llamados AFOL por sus siglas en ingles (Adult Fan Of Lego). Personas ya adultas que, a base de creatividad y trabajo, crean muchas cosas con Lego muy lejos de lo que los sets oficiales te permiten hacer, llevando más allá lo que parece posible construir con Lego.