35 cosas que me habría gustado saber antes de empezar a jugar a Kingdom Hearts 3

30 enero, 2019 zerofershu 0 comentarios

Ser un héroe no es fácil, y hacerlo portando una llave espada con toda la pinta de pesar un quintal menos aún. Para ello os traemos una guía con trucos y consejos para sobrevivir a Kingdom Hearts 3 como si llevases toda una vida jugando. Algunas acciones pueden parecer bastante obvias, pero dado que el juego no se molesta en explicarlas, puede que acabes descubriéndolas más tarde de lo que te gustaría reconocer.

Una colección de 35 cosas que me habría gustado saber antes de empezar a jugar a Kingdom Hearts 3 y que, seguro, muchos de vosotros sabréis apreciar. La guía está completamente libre de spoilers, así que no temas por encontrarte en ella alguna sorpresa desagradable.

Cómo mejorar en combate en Kingdom Hearts 3

Organiza bien tus atajos: Kingdom Hearts 3 no cuenta con una gran cantidad de magias y acciones, pero su organización es un poco caótica y obliga a navegar por menús poco intuitivos. La clave está en crear comandos que, mediante gatillos o la cruceta, te permitan acceder a las magias, objetos e invocaciones que más utilizas.
Experimenta con las distintas llaves espada: no te cases con una, por muy bonita que sea o muy interesantes que te puedan parecer sus habilidades. Prueba todas las que van llegando y, como mínimo, intenta averiguar qué niveles de transformaicón ofrecen.

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No dejes pasar los ataques especiales: puede que a veces las peleas sean un caos y creas que no necesitas ese ataque especial de Donald que parpadea en pantalla, pero son más útiles de lo que crees, así que intenta utilizarlos a no ser que tengas muy controlada la situación.
Muévete entre ataques especiales: si el que hay en ese momento por defecto no te convence, prueba a moverte con el gatillo izquierdo para seleccionar los otros que se hayan podido acumular.

Gasta PM en magias antes de utilizar la cura: importantísimo. Vas a perder toda tu barra de magia curándote, así que antes de hacerlo gasta magias que tengas a mano.
Hay habilidades que te guardan el PM justo para una cura: con la idea del consejo anterior en mente, si lo que te da miedo es quedarte sin el PM necesario para hacer la magia de cura, activa esta habilidad tan pronto la consigas.
Aprende a bloquear: puede hacerse muy pesado al principio, pero le acabas cogiendo el truco. Insiste hasta que tengas controlado el bloqueo porque de él dependen muchas de las luchas del último tramo del juego. Sora puede parar casi cualquier cosa si lo activas en el momento oportuno.
Algunos de los ataques más poderosos son contrataques: siguiendo ese último consejo no sólo te vas a librar de algún que otro golpe mortal, también conseguirás sacar adelante algunos de los ataques más poderosos del juego.
Apunta y bloquea un enemigo antes de disparar una magia: aunque bloquear enemigos cuando estás rodeado no siempre es lo más recomendable, seguro que quieres que ese Piro que lanzas impacte en un enemigo en vez de en un árbol. Activa el bloqueo para conseguirlo.
Asegúrate de centrarte en un tipo de mejoras: o ataque o magia, lo que más case con tu estilo, pero mantente fiel a él y equípate con espadas y accesorios que te ayuden a potenciarlo. Intentar ser equilibrado es muy complicado.

Los vínculos curan, úsalos a tu favor: si estás apurado, las invocaciones son tu salvación. Además de poder salvarte de algún que otro ataque especial del enemigo, rellenarán tu vida para que estés un poco más desahogado. Eso sí, no te hacen invencible una vez terminada la animación, así que ándate con ojo.
La habilidad autofinish es primordial para no dejar escapar ataques: si se te escapan los ataques finales de invocaciones y armas, esta habilidad será tu salvación. Asegúrate de tenerla siempre entre tus mejoras activas.
Todas las atracciones son interactuables: puede parecer obvio, pero he visto a gente quedándose de brazos cruzados mientras se pone en juego un ataque especial de atracción. Todas permiten acciones o encarar enemigos, incluido el barco pirata.
Las comidas de Ratatouille son la mejor forma de encarar un combate duro: con las estadísticas por las nubes las luchas son mucho más llevaderas, así que si una pelea se te resiste, una buena comida desde un menú de guardado puede ser la solución.
El combate aéreo es muy importante: aprende a usarlo y utiliza habilidades específicas para sacarle el máximo partido. Cuando te toque luchar en el aire lo agradecerás y, además, te mantiene a salvo de los ataques que puedan estar sucediendo debajo.
Puedes ajustar la IA de tus compañeros: esencial para cosas como las curas, permitiendo que tus compañeros te asistan mucho antes en vez de esperar a que estés al límite.
Aprovecha las animaciones: tanto las de los ataques especiales como las transformaciones serán vitales para evitar el daño de enemigos en las peleas, especialmente cuando te lanzan uno de esos ataques que llenan la pantalla.
No te preocupes demasiado por el nivel: puedes pasarte el juego como un mindundi si sabes combatir, así que asegúrate de seguir los consejos anteriores y, si te ves muy capaz, intenta superarlo con la habilidad de no ganar experiencia activada.

La exploración es parte del camino del héroe

Desplazarte a más velocidad: un truco muy tonto pero que tardé en descubrir es que, con el hechizo de hielo, puedes lanzar un hilo de hielo y saltar sobre él para moverte más rápido.
El modo acróbata es vital: además de ser muy útil en los combates también es la puerta de entrada a un montón de zonas altas a las que tal vez creas que no puedes llegar. Asegúrate de intentar escalar cada pared que veas porque no sabes qué puede estar esperándote arriba.
Destroza todo lo que veas: reconozco que llegados a cierto punto puede hacerse algo pesado, pero es algo muy recomendable si quieres ir siempre bien cargado de ítems y dinero.
No gastes dinero en ítems en las tiendas: el juego se encarga de lanzarte de todo a la cara a través de los combates, así que no rehuyas de ellos para evitar tener que pasar por caja.
Vuelve a los niveles anteriores: aunque no lo creas siguen guardando secretos. Además son la llave para hacer misiones secundarias y buscar secretos que se te hayan podido pasar.

Atento a los comentarios de tus compañeros: además de avisarte en combate para hacer un ataque, los comentarios de tus compañeros te servirán para saber que hay algún secreto cerca.
Vuelve a menudo a Villa Crepúsculo: no sólo podrás recomponerte y conseguir más ítems, también encontrarás los valiosos buzones para enviar postales que hayas podido obtener y conseguir premios.

Trucos y consejos para sobrevivir a Kingdom Hearts 3

Mejora a Sora: recuerda intentar mejorar a Sora y sus llaves espada siempre que puedas, tanto a través de la forja como buscando nuevos accesorios que equipar y, por descontado, actualizando sus habilidades.
Gasta los puntos de mejora: a menudo recibirás ítems que te permitirán mejorar estadísticas. Que no se queden cogiendo polvo en tu inventario.
No te obsesiones con crear la nave Gumi perfecta: lleva mucho tiempo y es más complicado de lo que imaginas crear una nave equilibrada. Mejor trabajar sobre los planos que vayas recogiendo.

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Aprovecha la primera visita al restaurante: es una opción que deberías utilizar a menudo, así que entrena para crear platos de los que tengas muchos ingredientes y así practicar de cara a cómo funcionan los siguientes.
Puedes obviar las cinemáticas de ataque: pulsando cuadrado/X o desactivándolas desde el menú te ahorrarás tener que tragarte cómo Simba sale de entre las llamas una vez más.

Revisa las misiones de fotografía: son uno de los coleccionables más fáciles del juego, así que y complétalas siempre que puedas y gana con ello valiosos objetos y mejoras de la forja.
Entra en los portales de batalla: hazlo siempre que puedas porque, además de ser muy divertidos, te entregarán nuevas acciones para los selfies e información sobre el lore del juego.
Si no te enteras de nada…: la historia de Kingdom Hearts es todo un culebrón, así que si en algún momento te pierdes, el archivo te ayudará a comprender la historia.
Revisa la forja: asegúrate de revisar si puedes crear algún objeto importante en la forja, puede ser la clave para mejorar tus armas.
Marca las habilidades con cabeza: revisa qué has desbloqueado y utilízalas centrándote en la estrategia que mejor se adapte a tu forma de jugar. Si te faltan puntos para una que realmente necesitas, seguro que hay algo que ni siquiera has usado.