Pensaba que los robots ya no podían sorprenderme. Hasta que probé un robot cortacésped
Los robots han llegado a nuestras vidas para quedarse. Hemos convertido a los altavoces en el cerebro de nuestros hogares, hay una encarnizada batalla por ver cuál es el mejor robot aspirador y el siguiente objetivo de las compañías es que también tengamos robots en el jardín.
En este caso hablamos de un grupo muy específico de usuarios: los que tienen jardín con césped. Si es tu caso, sabrás que cortar el césped es una de las tareas más insatisfactorias que existen. A los dos días vuelve a estar fatal, la máquina hace ruido y tienes que dar paseos, pero ¿qué pasa si tuviésemos una “roomba” en el jardín? Pues eso es lo que propone Segway con su Navimow H1500E, un robot cortacésped que hemos analizado y que nos ha sorprendido.
Ficha técnica del Segway Navimow H1500E
Segway Navimow H1500E |
|
---|---|
Área que puede cubrir |
1.500 metros cuadrados |
Alturas de corte |
30 mm a 60 mm |
Diámetro de corte |
210 mm |
Batería |
7,8 Ah Carga en base de carga Vuelve automáticamente cuando lo necesita |
Ruedas |
Dos delanteras de inercia Dos traseras motorizadas y dentadas Pendiente máxima de 45% |
Ruido |
54 dB |
Conectividad |
4G GPS |
Otros |
Certificación IPX6 Base con certificación IPX5 Compatible con cámaras y sensores ultrasónicos App para Android e iOS |
Precio |
2.400 euros |
Diseño robusto y que no se va a llevar el viento
Cuando analizamos un robot aspirador, sabemos perfectamente lo que vamos a encontrar. Además, también es fácil contártelo porque es un dispositivo que está en la mente de prácticamente todo el mundo. Pero… ¿un robot cortacésped?
Lo cierto es que el tamaño es bastante compacto. Eso me sorprendió, igual que el peso, aunque al revés. Son casi 16 kilos, que se dice pronto, así que te recomiendo que, una vez decidas el sitio en el que va a estar instalado, no lo muevas. En la parte trasera tiene un asa con el que lo puedes levantar, pero ya te digo que pesa.
La carcasa está fabricada en plástico y se siente de muy buena calidad. Tiene un acabado texturizado que le da un toque premium, pero también hace que la suciedad se pegue con bastante facilidad. Si en tu zona hay motas de arena en suspensión o algo así, enseguida se va a “ensuciar” con una capa de polvo.
Lo bueno es que tiene certificación IPX6, así que es resistente al agua. En la app puedes configurar que se vaya a la base si detecta lluvia, pero es una simple medida de protección. El día en el que lo configuré saltaron los aspersores (no recordé apagarlos) y se mojó. No le pasó absolutamente nada porque está preparado para ello.
En la parte superior tiene un gran módulo de GPS con un perímetro LED que nos indica el estado. Si parpadea es que algo va mal. Si está en verde o azul es que tiene comunicación con la base y el GPS y si está en rojo es que has pulsado el botón grande de ‘STOP’ o tiene algún problema, como que ha pillado una piedra grande o algo así. En ese caso, automáticamente, se detiene.
Además del LED rojo, tiene una pequeña pantalla que nos muestra códigos de estado si hay algún error, pero también el nivel de batería, las rayitas de cobertura con la base y el GPS, si está bloqueado o no y el porcentaje de terreno que ha cubierto en su última puesta en marcha. Bajo la pantalla están los botones de apagado, y puesta en marcha/vuelta a la base manual.
En la parte frontal tiene una pequeña pestaña que podemos quitar para conectar un accesorio muy interesante (y del que te hablaré más adelante) y en el morro tenemos una entrada para que los pines de carga hagan contacto, así como un parachoques de goma.
Si lo ponemos boca arriba vemos la plataforma de las cuchillas (de 21 centímetros de diámetro), así como la protección contra piedras de cierto tamaño, la guía metálica para el césped y las ruedas delanteras.
En la trasera tenemos la salida del césped (no tiene depósito, ojo con esto) y las enormes ruedas. Dependiendo del modelo son de plástico duro o más gomosas. En nuestro caso, siendo uno de los modelos más potentes, tenemos las ruedas gomosas y tengo que decir que solventan los “baches” y calvas del césped con holgura.
La pendiente máxima que es capaz de manejar es de un 45%, pero es algo que no he podido probar porque, básicamente, vivo en una llanura. Y, por otro lado, tenemos tanto la base de carga (de plástico, y esta da la sensación de ser de plástico más barato) y la antena GPS.
Un montaje sencillo si haces caso a las instrucciones
Visto cómo es el robot, vamos con el proceso de puesta en marcha. En cuanto abres el paquete verás un montón de elementos, pero no te agobies. Segway ha incluido todo lo necesario para el montaje, así que tenemos los elementos fundamentales (robot, base, pica para el GPS y la antena GPS), pero también embellecedores y elementos funcionales (tiras de velcro para amarrar el cable de la antena GPS a la pica, tirabuzones para fijar la base de carga al césped, cuchillas de recambio, un extensor del cable de la antena y la llave Allen para los tirabuzones).
No tendrás que poner ninguna herramienta por tu parte, y eso está genial. También tienes un libro bastante extenso con todo el papeleo legal (no te valdrá para mucho) y una guía de primeros pasos y configuración, así como un cartón con un código QR impreso. Soy una persona a la que le gusta ir por libre y no mirar instrucciones, pero te aconsejo que las leas con atención.
Siguiendo todos los pasos, la configuración es muy sencilla. Además, algo que me ha gustado es que en la propia aplicación te guían de forma muy visual, con videotutoriales en cada paso. Esto, por un lado, es fantástico, pero si tienes que repetir (por lo que sea) el proceso de configuración o calibrado, no podrás saltar los vídeos. Y es un tostón.
Ahora bien, si he dicho que la configuración es sencilla, ¿por qué íbamos a tener que repetir nada? Pues porque puede que tu caso sea como el mío y tengas que buscar el mejor sitio para poner la base del robot y que reciba la mejor señal GPS posible.
En mi parcela tengo un rinconcito en el que habría quedado genial: está oculto tras un arbusto, por lo que la antena no sería muy visible (tampoco es lo más estético del mundo, así que si está algo escondida, mejor), y además tiene una palmera cerca, por lo que la estación de carga queda bastante ‘recogida’. Vale, pues aunque debería llegar perfectamente la señal GPS, el robot decía que no.
El Bluetooth, el Wi-Fi de casa y todo estaba perfecto, pero la señal del GPS era débil. El fabricante indica que debemos dejar más o menos dos metros entre cualquier pared/árbol/arbusto y la antena, y claramente en ese rincón tenía cielo abierto, pero no daba por válida la señal GPS recibida y no me dejaba avanzar. Lo moví unos centímetros y nada, así que lo tuve que poner en una zona mucho más visible, donde queda peor, pero donde pilla señal perfectamente. Y funcionó.
Tras eso, llegó el momento de la puesta en marcha. Activé la conexión 4G del robot (gratis durante el primer año, luego pasa a 30 euros al año), actualicé el firmware, rellené un cuestionario en la app para ver qué tipo de terreno tengo (es algo que puedes saltar, no vale para mucho) y, tras cumplir todos los requisitos, el cortacésped me dio el visto bueno para empezar el calibrado.
Experiencia de uso
Esto no es como uno de esos robots aspiradores que van a su aire por casa, sin ningún tipo de mapeo ni orden. Tampoco tiene un LIDAR ni un sistema de escaneo de entorno a no ser que compremos un accesorio (de nuevo, te hablaré de él más adelante), así que se para cuando choca contra algo. De ahí el parachoques de goma.
Pero, como realmente el robot no es capaz de detectar el entorno en su versión ‘base’, tenemos que realizar un mapeo de nuestro césped. La primera vez que lo hagamos será hasta divertido, ya que pulsamos el botón, el robot sale de la zona de carga y aparecen unos mandos virtuales en la aplicación del móvil.
Debemos crear un perímetro conduciendo manualmente y teniendo en cuenta que la rueda derecha es la que marca ese perímetro. Debemos ir en dirección contraria a las agujas del reloj generando una especie de pared virtual. Y, oye, va bastante bien. Responde genial y, si nos equivocamos, tenemos la opción de hacer que vuelva sobre sus pasos seleccionando el icono del borrador en la app.
Segway indica que debemos dejar unos 15 centímetros con el borde de nuestro terreno, pero no hay que calcularlo a ojo: en la caja viene un cartón recortable con una base adhesiva que nos debemos pegar sobre la rueda derecha y que sirve de guía. Te recomiendo apurar todo lo posible e ir en línea recta, ya que cuando el robot se ponga a cortar de forma autónoma seguirá a rajatabla todos los movimientos que hayas hecho.
En mi casa tenemos unos 200 metros cuadrados destinados al césped, contando dos paseos de piedra que dividen ese terreno en tres parcelitas. Si es tu caso, no te preocupes. Cuando hayas definido un perímetro, puedes ir a la app, volver a la sección de mapas y seleccionar que quieres crear uno nuevo. Manualmente haces que pase por el paseo de piedra o baldosa y empiezas a mapear de nuevo el perímetro nuevo.
Cuando tengas todos los perímetros (tres en mi caso), puedes seleccionar zonas de paso para que el robot, automáticamente, “salte” de un perímetro a otro. Mis bordillos son de unos 5 centímetros y los superó sin problema.
Antes de darle al botón para que empiece a cortar el césped, toca hacer algunos ajustes más en la aplicación. Puedes seleccionar horarios para que el LED de estado se apague automáticamente, puedes configurar la altura de corte del césped desde los 3 centímetros hasta los 6 centímetros, puedes activar el modo de protección contra piedras y agua y hasta programar cortes.
Si haces esto, automáticamente el robot se pondrá a cortar el césped a la hora que quieras. Yo he programado domingo, martes y viernes de 8:00 a 11:00 y estarás pensando que estoy loco por decir que se ponga a funcionar a las ocho de la mañana porque eso debe hacer un ruido infernal, ¿verdad? Pues… no.
De hecho, es de las cosas que más me ha gustado. Según la web oficial, emite 54 dB, pero como no es una cifra muy clara, seguro que es más útil si te digo que hace menos ruido que una máquina de afeitar a la potencia mínima. Acostumbrados al rugido de los cortacéspedes tradicionales, esto es un ronroneo. No te enteras cuando te alejas unos metros, mucho menos si estás durmiendo dentro de casa.
Prácticamente, no tengo pegas con la aplicación. Aparte de un montón de tutoriales y de poner las cosas fáciles, está en perfecto castellano, es estable y funciona muy bien. El único “pero” es que no tengo la opción para marcar la parcela que quiero que arregle. Si le das al ‘play’, hará el 100% de lo que hayas mapeado. Con alguna actualización deberían dejar que seleccionemos una zona concreta.
Qué pasa con la detección de obstáculos
La navegación se hace por GPS. Para eso es todo el proceso de configuración y de selección de un buen punto al aire libre, y lo cierto es que es muy eficiente. Evita pasar dos veces por el mismo sitio y va cortando el césped de manera muy uniforme, pero como te he dicho, no tiene “ojos”.
Si en un momento dado el perro se pone delante, lo atropellará hasta que le de por parar. Y si es un balón o algo así, irá arrastrándolo. Considero que no causará heridas porque realmente es complicado que algo se meta en las cuchillas (tanto por la elevación del robot como por las rejillas metálicas que guían el corte del césped), pero vamos, va “al choque”.
Sin embargo, hay solución. En el modelo más caro tenemos un sensor ultrasónico en el paquete, pero es algo que se puede comprar aparte e instalar en cualquiera de los otros modelos. ¿Recuerdas que te dije antes que había una plaquita que podíamos quitar en el frontal? Para eso sirve, ya que ahí van los conectores.
También podemos comprar un dispositivo llamado Vision Fence, que es el que hemos probado nosotros y que, básicamente, es un sistema de cámara con ciertos algoritmos de inteligencia artificial. Tiene una visión de 140 grados, se actualiza mediante Wi-Fi, tiene certificación IPX7 y funciona muy bien siempre que haya luz.
Cuando estás creando el mapa tienes la opción de crear zonas de exclusión. Por ejemplo, alrededor de un árbol. Te recomiendo hacerlo, pero como tenía la cámara, decidí no configurarlo para ver qué pasaba. Y lo cierto es que me ahorré un paso innecesario porque el robot detecta perfectamente el obstáculo (el árbol) y lo esquiva de manera precisa.
Además, si nota algún cambio en la superficie, evita pasar por ahí. Y también es muy rápido parándose si detecta un pie o las patas de un perro, hasta el punto de que mi perra pasó corriendo delante del robot y éste se paró en seco al instante. Fue un instante, pero se paró, retrocedió y volvió a emprender la marcha. Ahora bien, como digo, es una cámara, así que necesita algo de luz.
Cuando la luz cae, si no has mapeado un árbol como un punto de exclusión, lo rodeará como hacen algunos robots aspiradores o como haría este modelo si no tuviera el Vision Fence instalado: chocando hasta que le dé la vuelta completa y “sepa” que ahí hay algo que no se mueve. Por el precio, considero que un LIDAR no habría venido nada mal.
Tiempo que tarda/autonomía
Y antes de pasar a la conclusión, vamos con un tema importante: el tiempo que tarda en cortar el césped y la autonomía. Por lo segundo no te vas a tener que preocupar y, de hecho, hay cuatro modelos de Navimow y el propio nombre nos da una pista del terreno que cubren. Los tenemos de 500 metros cuadrados, de 800, de 1.500 (el nuestro) y de 3.000 metros cuadrados. Este último es el que viene con el sensor ultrasónico en el paquete.
Todos tienen las mismas especificaciones técnicas en lo que a cortado y GPS se refiere, pero solo los 800E, 1500E y 3000E cuentan con conexión 4G y el modo “encuéntrame” por si te lo roban. Esto es lógico porque es el GPS y el 4G el que lo hacen posible. Y las baterías se han calculado para poder cubrir esa cantidad de terreno.
En el caso del H1500E, tenemos una batería de 7,8 Ah (enorme) que no se ha calentado lo más mínimo estos días y que permite cubrir esos 200 metros cuadrados sin problema. En total, en mi casa consume un 35% de la batería. Sobre el tiempo que tarda, aquí tengo que decir que tendrás que dejarlo trabajar porque tarda unas dos horas en cubrir mi territorio.
No puedo decir qué pasará en un jardín distinto (al final, entre los árboles y las zonas de baldosa, tiene más obstáculos que si esos 200 metros cuadrados fueran solo de césped), pero tampoco es un proceso por el que tengamos que tener prisa. Y pudiendo programar el corte, no nos tenemos que preocupar por los tiempos.
Tampoco tendría prisa con la carga. Para tener un 100% necesitarás algo más de tres horas. ¡Ah! Algo importante: tanto la fuente de alimentación como los cables tienen protección contra el agua y los tirones.
Segway Navimow H1500E, la opinión de Xataka
Llegamos al final del análisis de este Navimow H1500E y… bueno, es un dispositivo para un tipo de usuario muy concreto. A no ser que tengas una superficie de césped bastante amplia, no sé si recomendaría la compra porque la inversión es considerable. Nuestro modelo se mueve alrededor de los 2.400 euros el sistema Vision Fence son otros 300 euros. El más barato, el H300E, cuesta unos 1.600 euros.
Es una inversión, pero la verdad es que con el dinero y el terreno, es un dispositivo que “da gusto” tener. Deja el césped muy bien, perfectamente ‘afeitado’ a la altura que le marquemos, no hace ruido, no necesita un gran mantenimiento, no hace falta salir al jardín para ver qué hace porque todo se marca en la aplicación y el control es extremadamente simple.
Una vez hecha la configuración, te olvidas. Sin embargo, siendo un muy buen producto, lo he probado en las mejores condiciones posibles al contar con el sistema de cámara. Por ese precio debería tener un LIDAR para mapear los árboles o elementos decorativos como un banco o una fuente automáticamente, así como un sistema antichoque incorporado en todos los modelos, sobre todo para trabajar eficientemente cuando caiga la luz.
Dicho esto, son las mayores pegas que puedo poner a uno de esos dispositivos que echaré de menos cuanto me toque devolverlo, ya que no sabía que quería un robot cortacésped hasta que he analizado uno. Curiosamente, lo mismo me pasó con los robots aspiradores…
El dispositivo ha sido cedido para la prueba por parte de Segway. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas.
–
La noticia
Pensaba que los robots ya no podían sorprenderme. Hasta que probé un robot cortacésped
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Alejandro Alcolea
.