¡Unicornio a la vista! El McLaren F1 029 Creighton Brown, a subasta: su precio estimado es de 15 millones de dólares
Pocos coches presumen de reinar en el olimpo de los más emblemáticos de la historia, pero sin duda el McLaren F1 está entre ellos. En los seis años que estuvo en producción, la firma británica concibió solo 106 unidades, incluyendo los prototipos y modelos de competición, de las cuales 64 fueron de calle. Y una de ellas se subasta en pocos días en Pebble Beach.
En concreto se trata del McLaren chasis 029 (el modelo 25 homologado para carretera) y es toda una máquina del tiempo pues su odómetro promete que únicamente ha recorrido 389 km (242 millas). A lo que se suma que va pintado en la tonalidad exclusiva Creighton Brown, solo utilizada para esta unidad, por lo que la convierte en única.
Y hay más porque fue concebido ad hoc para Creighton Brown, por algo su color fue bautizado en honor del que fuera co-propietario de McLaren International con Ron Dennis y que contribuyó al nacimiento de McLaren Cars y del propio McLaren F1.
Con estos ingredientes, Gooding & Company lo pone a disposición del mejor postor en la subasta que celebrará en Pebble Beach, enmarcada en la Monterey Car Week, entre el 11 y el 14 de agosto.
Su precio estimado es de 15 millones de dólares (unos 12,7 millones euros al cambio actual). Una cifra astronómica, pero nada descabellada: no en vano, la que fue la primera unidad de las siete homologadas específicamente para EE.UU se subastó en 2017 por 15,6 millones de dólares.
Una máquina del tiempo de leyenda
Este McLaren F1 029, que parece que ha viajado en el tiempo desde que saliera de fábrica el 23 diciembre de 1994 hasta nuestros días, nació para convertirse en el particular de Creighton Brown.
No obstante, dado que ya atesoraba uno de los prototipos del superdeportivo, encomendó a la marca venderlo. Y McLaren hizo lo propio, constando así como su primer propietario un coleccionista japonés al que le fue entregado en 1995.
El que fue el F1 homologado para carretera número 25, se distingue por la mencionada pintura marrón Creighton Brown en combinación con un interior tapizado en cuero marrón claro y Alcántara, con detalles en Brazilian Brown más oscuro.
Este exclusivo traje acompaña las bondades ya conocidas de este legendario superdeportivo, con chasis monocasco en fibra de carbono y puesto de conducción central, que hasta la llegada del Bugatti Veyron en 2007 fue el coche de producción más rápido firmando una punta de 391 km/h.
Su corazón es un V12 atmosférico en posición central de origen BMW de 6.1 litros, que rinde 627 CV, a un máximo de 7.500 rpm, y 652 Nm de par, en el que varios componentes, así como la cubierta, van bañados en oro.
Esta poderosa mecánica va gestionada por un cambio manual de seis velocidades y el conjunto se completa con unos frenos Brembo con discos ventilados y perforados de 332 mm delante y 305 mm atrás o una suspensión de doble horquilla independiente.
El hecho de que tenga tan pocos kilómetros se debe a que en los primeros 17 años en los que estuvo en poder de su primer dueño estuvo esencialmente expuesto. Según Gooding & Company, se cree que la mayor parte de su kilometraje lo firmó en sesiones de grabación en una pista de pruebas cerca de Tsukuba.
En 2012, fue vendido a otro coleccionista nipón, Shinji Takei, y a través del conocido distribuidor y especialista japonés Art Sports, para en 2013 cruzar el Pácifico hasta EEUU, donde ha estado desde entonces.
El que es su dueño actual lo sometió a algunos cambios mecánicos a fin de cumplir la normativa de emisiones estadounidense, aunque se han conservado todos los componentes originales por si un comprador europeo se hace con sus servicios.
Por lo demás, se mantiene tal y como era cuando salió de fábrica, además de cada uno de sus propietarios lo ha sometido a los mantenimientos de rigor, para mantenerlo al día. De hecho, hasta conserva los neumáticos Goodyear Eagle originales como confirma su documentación.
La misma, junto a los componentes señalados, una caja de herramientas FACOM, un juego de maletas tapizadas a juego con el cuero marrón que viste su interior o un reloj AG Heuer 6000 Chronometer acompañan este ejemplar. Asimismo también incluye una funda o guantes McLaren para tareas mecánicas.
Como curiosidad señalar que a menudo, por su tonalidad similar, se ha confundido a este McLaren F1 029 con la única de las unidades del superdeportivo de la que se desconoce su paradero y cuya pista se perdió en Culiacán (Sinaloa), México. Pero aquel era el 039.
Foto: Gooding & Company.
En Motorpasión | Esta es la verdadera razón por la que Peugeot provocó que el Porsche 901 pasase a llamarse Porsche 911 | Con motores Lada y diseños dignos de Lamborghini: los “superdeportivos” de la URSS
–
La noticia
¡Unicornio a la vista! El McLaren F1 029 Creighton Brown, a subasta: su precio estimado es de 15 millones de dólares
fue publicada originalmente en
Motorpasión
por
Alejandra Otero
.