En California, uno de cada cinco conductores de coche eléctrico ha vuelto a comprarse un coche de gasolina, según este estudio
Uno de cada cinco conductores de coche eléctrico ha vuelto a comprarse un coche de gasolina, al menos en California. La razón es muy simple, están muy descontentos con los tiempos de carga de sus coches. Así, lo recoge un estudio de la Universidad de California, publicado en Nature Energy.
Y eso es un problema para la industria. Conseguir que alguien dé el paso y compre un eléctrico ya es algo complicado, pero si además no le gusta la experiencia y no repite, las pérdidas para los fabricantes pueden ser millonarias.
La mayoría de los estudios relativos al coche eléctrico se centran en los pros y los contras del coche eléctrico. Con ello buscan determinar cuales son los obstáculos que tienen salvar y qué lleva a alguien a comprarse un coche eléctrico.
Sin embargo, hay pocos estudios acerca de cómo es luego la experiencia con un coche eléctrico, si esos automovilistas están contentos o no con su compra y, más importante, si repetirían. Y es que casi tan importante para quienes venden coches eléctricos que el cliente este contento con su primera vez si quieren volver a venderle un coche en el futuro.
Según un estudio reciente publicado en Nature, esto va a ser un reto casi tan grande como conseguir que la gente se pase a los coches eléctricos en primer lugar. En ese estudio de la Universidad de California UC Davis descubrieron que el 18% de los compradores de vehículos eléctricos de batería volvieron a los coches de gasolina, al igual que el 20% de los compradores de híbridos enchufables. El principal problema citado por los encuestados fueron los tiempos de carga.
Los investigadores del Instituto de Estudios del Transporte de la UC Davis preguntaron a 1.727 propietarios de coche eléctrico en California entre 2015 y 2019 si se habían cambiado de coche y qué coche habían comprado, en el sentido de si otro eléctrico o uno de gasolina.
Los investigadores descubrieron que aproximadamente uno de cada cinco esos automovilistas había vuelto a los coches de gasolina, lo que significa que decidió activamente deshacerse de su coche eléctrico anterior y no quiso otro eléctrico.
A nivel de fabricantes, sólo el 11% de los propietarios de Tesla volvieron a comprar un coche de gasolina, mientras que el 36,9% de los propietarios de Fiat 500e lo hicieron. Los propietarios de Toyota y Ford también tuvieron tasas de abandono de coches eléctricos superiores a la media, mientras que Chevrolet y Volkswagen tuvieron tasas de abandono de sólo el 14,2% y el 17,2%, respectivamente.
Varios días para una cargar una batería
¿La razón? Los tiempos de carga exageradamente largos. Largos, como dejar cargando toda la noche el coche para 36 millas (unos 60 km) de autonomía. Y es que la gran mayoría de los encuestados que han vuelto al coche de gasolina solo disponían de tomas de carga doméstica y contaban con la red de carga de la vía pública, todavía más débil y complicada que en Europa.
Recordemos que el estudio se centra en Estados Unidos y que la corriente doméstica es de 120 V. En esas condiciones, es normal que cargar por completo la batería de un Ford Mustang Mach-E puede llevar varios días. No es el caso en Europa donde con nuestra corriente de 240V se consigue una autonomía más que decente en una sola noche, y se puede cargar por completo la batería con una wallbox en cuestión de horas.
Sin embargo, este estudio demuestra de nuevo que lo más importante para que un producto como el coche eléctrico funcione no solamente ha de responder a una necesidad -movilidad personal y familial-, y ser asequible frente a un gasolina equivalente, sino que además ha de ser fácil de usar, que no suponga un nuevo problema.
Y es justamente lo que se desprende de ese estudio. Para los encuestados, la autonomía del coche, por ejemplo, no era un problema, el único problema eran los tiempos de carga. En el fondo, los 0-100 km/h, los 1.000 km de autonomía, la conducción autónoma y su mejor eficiencia energética no son determinantes para que el coche eléctrico se imponga. El coche eléctrico ha de ser una solución, no un problema.
Es algo que en Tesla entendieron desde el principio cuando la empresa decidió crear su extensa red de Supercargadores. No se responde a un problema (movilidad limpia) creando otro nuevo (tiempos de carga larguísimos). Rivian también lo sabe y ha decidido crear también su propia red de carga.
Si los fabricantes consiguen que recargar una batería dure lo mismo que repostar con gasolina y todo ello a un precio similar, tanto de la energía como del coche, el eléctrico de batería se impondrá. Mientras tanto, se buscan soluciones alternativas, como el hidrógeno, los e-fuels y las estaciones de intercambio de baterías.
Y es que el coche sea eléctrico no es un inconveniente per se. De hecho, el 65% de los encuestados que renunciaron al coche eléctrico dijeron considerar de nuevo un eléctrico como su próximo coche.
En Motorpasión | Probamos el Fiat 500e: el icono italiano convertido en coche eléctrico es todo suavidad y dulzura
–
La noticia
En California, uno de cada cinco conductores de coche eléctrico ha vuelto a comprarse un coche de gasolina, según este estudio
fue publicada originalmente en
Motorpasión
por
Daniel Murias
.