Telefónica vuelve a la vieja costumbre de atar usuarios: la nueva Fusión y sus móviles “gratis” imitan las penalizaciones de la permanencia

Poco le ha durado a Telefónica la estrategia de eliminar cualquier tipo de atadura. El pasado mes de septiembre, la compañía anunciaba que eliminaba la permanencia para todos sus productos. Sin embargo, con las nuevas tarifas Movistar Fusión, Telefónica ha encontrado una nueva manera de atar a algunos clientes: ofrecerles móviles “gratis”.

La operadora asegura que después de 36 meses, podremos “quedarnos el smartphone por solo un euro”. Pero en la práctica, lo que ocurre es que si el usuario pide el móvil y decide darse de baja, deberá pagar una parte. Un alquiler de smartphones que se promociona como la posibilidad de obtener dispositivos libres gratis o a menor coste, pero que supone la vuelta de Telefónica a su clásica estrategia de “más por más”. Una en la que se nos ofrecen más servicios, pero acompañados de sus respectivos costes.

Qué condiciones aplica Movistar en sus nuevas tarifas Fusión con smartphone incluido

En función de la tarifa contratada, Movistar ofrece una serie de móviles incluidos a los usuarios que así lo deseen. Algunos de ellos disponibles por 0 euros al mes, en función de la tarifa elegida. Encontramos modelos como el Xiaomi Redmi 9 y hasta el iPhone 12 o Galaxy S21, estando estos últimos disponibles por un pago al mes. Por un lado ofrece un Seguro Móvil adicional desde un euro al mes y por otro establece un contrato de arrendamiento del smartphone que dura 36 meses.

El primer punto es que solicitar el smartphone tiene una subida mínima de 3 euros al mes para cada plan. Movistar habla de “móviles incluidos” con un pago final de un euro, pero haciendo una sencilla multiplicación se puede apreciar como deberemos pagar al menos 108 euros durante este tres años para obtener el smartphone.

La propia Movistar explica que para darse de baja del plan habrá que abonar un coste y una penalización. De hecho, en las propias condiciones de arrendamiento se utiliza el término penalización.

“Si quieres darte de baja de Fusión antes, solo deberás abonar el coste actualizado del smartphone teniendo en cuenta el coste inicial y el tiempo transcurrido desde el inicio del servicio de arrendamiento. También, puedes devolver el terminal si está en buen estado y conservas la caja original. En el caso de la devolución tendrás que abonar una penalización inferior al coste actualizado del smartphone”.

En caso de baja voluntaria se deberá pagar una cuota por baja anticipada. El usuario deberá devolver el smartphone y se aplicará una penalización en función del nivel del smartphone solicitado.

En las propias ‘Condiciones Generales de Arrendamiento de Terminal Móvil en Fusión’, Telefónica deja la puerta abierta a posibles negociaciones y contraofertas: “en cualquier caso, Movistar se reserva el derecho de poder ofrecer al cliente la opción de adquisición del terminal. De darse este supuesto, el precio se calcularía en función del valor de
depreciación lineal del Smartphone en la fecha de solicitud de la baja”.

Según las condiciones del anexo, en caso de no devolver al teléfono en buen estado habrá que abonar el 100% del CTA. Lo que supone que si perdemos el terminal habrá que hacer frente a casi todo su coste adicional.

Telefónica informa además que “el servicio renting no es amortizable antes de los 36 meses” y solo se podrá hacer si el usuario se da de baja.

Las nuevas tarifas Fusión no introducen de nuevo la permanencia, pero ese reclamo de “smartphone incluido” sí supone un compromiso con la operadora, de al menos 36 meses. Una manera diferente de establecer un contrato de duración determinada con sus usuarios. Esta vez no por unos precios determinados en el internet o las llamadas, sino en el acceso a los smartphones para conectarse.

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Telefónica vuelve a la vieja costumbre de atar usuarios: la nueva Fusión y sus móviles “gratis” imitan las penalizaciones de la permanencia

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Xataka

por
Enrique Pérez

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