Lo estábamos esperando: el nuevo BMW M2 mantiene su esencia con 460 CV, cambio manual y tracción trasera
¡Al fin! Aquí esta la segunda generación del BMW M2, un coche compacto de carrocería coupé que está llamado a ser uno de los únicos coches puros y auténticos que sobrevivan a la era de la electrificación. Algunos datos para ir abriendo boca: motor de 6 cilindros en línea, 460 CV, 0 a 100 km/h en 4,1 segundos y mantiene la caja de cambios manual de seis velocidades. Pero hay mucho más…
El BMW M2 Coupé ha sido durante muchos años uno de los coches favoritos de los entusiastas de la conducción. Este coche está llamado a ser la reencarnación moderna de los antiguos BMW 2002 turbo que dieron tantas alegrías a la marca en los años 70, al posterior BMW Serie 1 M Coupé que tuvimos ocasión de probar en Motorpasión en su momento y, por qué no decirlo, al anterior BMW M2 Coupé que tantas pasiones desató.
De aquel modelo probamos todo lo habido y por haber. M2 Coupé, M2 Coupé M Performance, M2 Competition, M2 Competition M Performance, M2 CS…y es que era difícil aburrirse de conducir el que ha sido sin duda uno de los mayores éxitos de BMW M GmbH en toda la historia de la división deportiva de BMW. Incluso nos dimos alguna vuelta a Nürburgring Nordschleife en uno.
Ahora, con la llegada de esta nueva generación, se plantea la duda de si habrán sabido mantener la esencia de este modelo, sobre todo teniendo en cuenta que el nuevo utiliza la base de los BMW M3/M4 y que por tanto, es un modelo más grande que su antecesor. Y claro, más grande también supone más pesado y generalmente más torpe.
Para comprobar si al volante se sigue percibiendo como un BMW M2, habrá que esperar hasta abril de 2023 que es cuando se comenzarán a entregar las primeras unidades.
¿Qué cambia en el nuevo BMW M2?
Mucho. Como decíamos antes, el nuevo modelo utiliza el chasis adaptado de los BMW M3 y M4, de ahí que la longitud, la anchura y el ancho de vías hayan aumentado considerablemente en comparación con el modelo predecesor.
Es algo que ocurre en la mayor parte de modelos. Un BMW X3 de hoy en día es tan grande como el BMW X5 de anterior generación, mientas que el BMW X1 que está llegando ya a los concesionarios, es tan grande como el BMW X3 de anterior generación.
Esa tendencia a hacer coches más grandes para vender “más coche”, tiene un componente de riesgo cuando hablamos de coches deportivos compactos como este, ya que pueden perder su sentido y aburguesarse. Por suerte eso parece no ocurrir en el nuevo BMW M2, que mantiene su aspecto atlético con proporciones de coupé musculado. Ayuda también el hecho de que la altura es la única cota que se ha reducido respecto al antecesor.
Así el nuevo M2 mide 214 milímetros menos de largo que el BMW M4 Coupé y tiene una distancia entre ejes 110 milímetros menor. ¿Será suficiente para hacerlo más rápido, ágil y dinámico que sus hermanos mayores? Lo veremos.
Lo que es seguro es que su diseño exterior generará debate. Es algo inevitable siempre que BMW lanza un nuevo modelo al mercado, incluso en este caso en el que no han arriesgado tanto como con los M3 y M4 con sus característicos riñones delanteros verticales haciendo la función de parrilla delantera.
La diferenciación de este modelo con los Serie 2 Coupé de los que deriva es evidente. El frontal está marcado por una parrilla con los riñones de BMW sin marco con barras horizontales, los cuales tienen unas dimensiones contenidas si los comparamos con los modelos mencionados anteriormente.
También destaca la toma de aire inferior con el típico diseño de BMW M, dividida en tres secciones con contornos casi rectangulares.
Si llevamos la vista hacia los laterales, las formas son bastante limpias y las aletas tienen destacadas prominencias para darle ese aspecto musculoso y potente sobre el asfalto.
La zaga, como manda la tradición en los BMW M actuales, es muy potente gracias al llamativo alerón integrado en las formas de la tapa del maletero y a la combinación de este con los reflectores dispuestos verticalmente.
El difusor por su parte queda integrado en el faldón trasero, manteniendo su diseño purista y dando cabida de forma bastante natural a las dos salidas de escape dobles que van situadas en una posición bastante centrada.
En opción el cliente puede equipar el coche con el techo de fibra de carbono, algo que en el anterior BMW M2 solo estaba disponible en el caso de la versión CS. Al equiparlo se ahorran seis kilos respecto al modelo con techo convencional.
Las llantas M son de 19 pulgadas delante y 20 pulgadas detrás, con una pulgada más de ancho que las que montan de serie los BMW M3 y BMW M4. En opción hay neumáticos de circuito.
La variedad cromática está formada por dos pinturas sólidas y tres metalizados, incluyendo los colores Zandvoort Blue y Toronto Red exclusivas del nuevo BMW M2.
Por dentro, la digitalización se combina con la deportividad
En el interior han conseguido mezclar con aparente buen criterio elementos que no siempre casan bien, como las pantallas con los asientos tipo baquet M de fibra de carbono.
El salpicadero luce detrás del volante la pantalla de información de 12,3 pulgadas, con nuevas grafías específicas incluyendo las luces que indican el momento óptimo para el cambio de marcha cuando se acerca al corte de encendido.
La pantalla de información central es de 14,9 pulgadas y tiene forma curva, uniéndose a la pantalla de detrás del volante. Todas ellas se manejan desde el BMW iDrive basado en el sistema operativo BMW ID8.
El coche también está preparado para el uso mediante el control táctil y por voz, sistemas cada vez más perfeccionados como hemos visto en sus hermanos mayores de última generación, como los BMW i4 e iX.
De serie son el climatizador automático de tres zonas, el BMW Live Cockpit Plus con sistema de navegación BMW Maps, entre otras cosas, mientras que en la lista de opciones está el techo solar de cristal y el sistema de sonido envolvente Harman Kardon.
En todo coche deportivo que se precie, los asientos son un elemento clave. En el primer BMW M2 se criticó que los asientos fuesen los mismos del Serie 2 Coupé, pero en este llegan unos asientos deportivos de nuevo diseño con superficies en Sensatec/Alcantara.
Los que busquen algo más tienen dos opciones: o bien los asientos M Sport exclusivos con reposacabezas integrados y superficies perforadas en cuero Vernasca/Sensatec o irse a los asientos tipo baquet M de fibra de carbono diseñados principalmente para el uso en circuito, con los que se reduce el peso del conjunto en 10,8 kilos.
Mecánica tradicional a la altura de lo esperado
En cuanto a la mecánica, hay buenas noticias. No hay rastro de hibridación y pesadas baterías por aquí, con el fin de mantenerlo como un coche puro y auténtico.
Bajo el capó se encuentra el motor de seis cilindros en línea de 3.0 litros con tecnología M TwinPower Turbo que ahora entrega 90 CV más que antes hasta alcanzar 460 CV.
El par máximo es de 550 Nm, se entrega entre las 2.650 y las 5.870 RPM y la potencia máxima se alcanza a las 6.250 RPM. Sube hasta un máximo de 7.200 RPM. Según BMW responde a las características clásicas de M, con una respuesta instantánea y una entrega de potencia lineal en todo el rango de revoluciones.
Los sistemas de refrigeración y suministro de aceite se han diseñado para soportar fuerzas longitudinales y laterales extremadamente altas en circuito.
También hablan de una banda sonora emocionante gracias al sistema de escape específico de M con válvulas controladas electrónicamente, algo difícil de conseguir hoy en día.
El coche de serie equipa la caja de cambios M Steptronic de ocho velocidades con Drivelogic, que incluye tres modos de cambio, una palanca de nuevo diseño M y levas de cambio en el volante.
Los más puristas pueden pedir en su lugar la caja de cambios manual de seis velocidades con asistente de cambio de marcha, el cual puede desactivarse. De serie es también el diferencial M activo en el eje trasero.
Todo ello da como resultado un coche de dimensiones compactas, con corta distancia entre ejes, una excelente rigidez longitudinal y torsional ayudada por los refuerzos específicos de M. La distribución del peso es perfecta, ya que va al 50:50.
Nürburgring Nordschleife como campo de pruebas
Los ingenieros y pilotos de desarrollo se han dado muchas vueltas a Nürburgring Nordschleife para poner a punto este coche, centrándose en conseguir la máxima agilidad.
La suspensión M adaptativa con amortiguadores controlados electrónicamente y la dirección M Servotronic con relación variable son de serie.
Lógicamente con el aumento de prestaciones y potencia, los frenos han de estar a la altura. Encontramos los frenos M Compound con pinzas de seis pistones delante y frenos de un pistón y pinza flotante detrás.
El sistema permite variar entre dos ajustes para el tacto y la respuesta del pedal.
Por su parte, el Control Dinámico de Estabilidad DSC incluye el modo M Dynamic y el sistema de limitación del deslizamiento de las ruedas integrado. El sistema M Drive Professional de serie incluye el control de tracción M, que permite ajustar la intervención del sistema de limitación del deslizamiento de las ruedas en hasta diez niveles.
El M Drift Analyser y el M Laptimer también forman parte del equipamiento de serie.
El volante incluye botones M instalados para activar dos configuraciones previamente personalizadas. Si quieres también puedes ir modificando los diferentes elementos mediante botones específicos para los ajustes del motor, el chasis, la dirección, el sistema de frenos y el control de tracción M.
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La noticia
Lo estábamos esperando: el nuevo BMW M2 mantiene su esencia con 460 CV, cambio manual y tracción trasera
fue publicada originalmente en
Motorpasión
por
Héctor Ares
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